Home Sociedad La cohesión social en pandemia por Ignacio Núñez
0

La cohesión social en pandemia por Ignacio Núñez

La cohesión social en pandemia por  Ignacio Núñez
0

La disminución sostenida de la pandemia permite analizar, de forma más fría, algunas consecuencias que ésta tuvo sobre determinados comportamientos de los integrantes de nuestra sociedad. Como sostiene el economista Andrew Lo (2015), las dinámicas del mercado corresponden a las dinámicas poblacionales, por lo que se podría asumir que los fenómenos económicos que se manifestaron durante la pandemia son reflejo de las conductas poblacionales subyacentes.

En términos evolutivos, las personas guían sus conductas en base a distintos sistemas motivacionales que buscan, en primera instancia, satisfacer las necesidades básicas de supervivencia y reproducción (Durante & Griskevicius, 2016). Frente a una amenaza, los animales responden mediante los instintos de supervivencia compuestos por las conductas de “lucha o huida” hasta que el peligro pasa y se vuelve a tener una sensación de seguridad. El miedo del ser humano frente al peligro constante e invisible del Covid-19 desencadenó respuestas de aislamiento, la adopción de hábitos de mayor cuidado sanitario y el distanciamiento social.

Dada la condición de animal social del ser humano, la cohesión social jugó un papel fundamental en su adhesión masiva a las medidas sanitarias, ya que ésta lleva a los individuos a imitar el comportamiento de los miembros cercanos para evitar la segregación grupal y evitar el rechazo social (Vladas & Kenrick, 2013). De esta forma, la activación de los instintos básicos de supervivencia, combinado con el accionar individual gobernado por normas y reglas implícitas nos ayudan a entender algunos de los fenómenos característicos de la pandemia.

Cuando se declaró la emergencia sanitaria el 13 de marzo del 2020, se produjo un aumento inmediato de la demanda de productos no perecederos de higiene y alimento. Esto, definido como “panic buying” por Bentall et al. (2021), es una respuesta típica a situaciones de crisis en donde se percibe que va a producir un desabastecimiento de productos de primera

necesidad. Según los autores, esto ocurre como una respuesta lógica y adaptativa al riesgo de escasez de elementos para la supervivencia personal y familiar. Esto es consecuencia, según Bentall et al. (2021), de que las personas captan señales de desabastecimiento (shortage cues en inglés) en los supermercados (góndolas vacías, falta de productos, etc.) que refuerzan su ansiedad por la posible falta de suministros, llevando al aumento de consumo de estos productos, lo que generan más shortage cues que, creando un círculo vicioso que culmina en el desabastecimiento real.

Como fue observado por Lo (2004), las dinámicas del equilibrio y desequilibrio de los mercados son adaptaciones heredadas para responder a los desafíos del entorno los cuales son reflejados en el comportamiento económico de los individuos. De la misma forma en que las restricciones generadas por la pandemia perjudicaron a ciertas industrias, por ejemplo, el turismo y la hotelería, se vio un desarrollo inmenso en otros, como fue el caso de las telecomunicaciones y el comercio electrónico. Esto refleja la constante adaptación de las personas a su entorno, que se traduce en la evolución de sus hábitos de consumo.

Con la pandemia, volvimos a ver el ser animal que prioriza la supervivencia; ahora que parece disminuir, deberíamos empezar a ver una normalización en las conductas sociales y económicas en el corto plazo, mientras que el largo plazo todavía se mantienen interrogantes que el tiempo se encargará de aclarar.

Bibliografía:

Bentall RP, Lloyd A, Bennett K, McKay R, Mason L, Murphy J, et al. (2021) Pandemic buying: Testing a psychological model of overpurchasing and panic buying using data from the United Kingdom and the Republic of Ireland during the early phase of the COVID-19 pandemic. PLoS ONE 16(1): e0246339. https://doi.org/10.1371/ journal.pone.0246339

Durante, K., M., & Griskevicius, V. (2016). Evolution and consumer behavior. Current opinion in psychology, 10, 27-32.

Lo, A. (2004). The adaptive Markets Hypothesis. Market efficiency from an evolutionary perspective. The journal of Portfolio Management, 15-26.

Lo, A. (2015). The wisdom of crowds vs. the madness of mobs. En T. W. Malone & M. S. Bernstein. (1), Handbook of Collective Intelligence (pp. 21-37). Ann Arbor: The MITPress.

Vladas, G. & Kenrick, D., (2013). Fundamental Motives: How evolutionary needs influence consumer behavior. Journal of consumer psychology, 23(3), 372-386

POR MÁS PERIODISMO, APOYÁ VOCES

Nunca negamos nuestra línea editorial, pero tenemos un dogma: la absoluta amplitud para publicar a todos los que piensan diferente. Mantuvimos la independencia de partidos o gobiernos y nunca respondimos a intereses corporativos de ningún tipo de ideología. Hablemos claro, como siempre: necesitamos ayuda para sobrevivir.

Todas las semanas imprimimos 2500 ejemplares y vamos colgando en nuestra web todas las notas que son de libre acceso sin límite. Decenas de miles, nos leen en forma digital cada semana. No vamos a hacer suscripciones ni restringir nuestros contenidos.

Pensamos que el periodismo igual que la libertad, debe ser libre. Y es por eso que lanzamos una campaña de apoyo financiero y esperamos tu aporte solidario.
Si alguna vez te hicimos pensar con una nota, apoyá a VOCES.
Si muchas veces te enojaste con una opinión, apoyá a VOCES.
Si en alguna ocasión te encantó una entrevista, apoyá a VOCES.
Si encontraste algo novedoso en nuestras páginas, apoyá a VOCES
Si creés que la información confiable y el debate de ideas son fundamentales para tener una democracia plena, contá con VOCES.

Sin ti, no es posible el periodismo independiente; contamos contigo. Conozca aquí las opciones de apoyo.

//pagead2.googlesyndication.com/pagead/js/adsbygoogle.js
temas:
Semanario Voces Simplemente Voces. Nos interesa el debate de ideas. Ser capaces de generar nuevas líneas de pensamiento para perfeccionar la democracia uruguaya. Somos intransigentes defensores de la libertad de expresión y opinión. No tememos la lucha ideológica, por el contrario nos motiva a aprender más, a estudiar más y a no considerarnos dueños de la verdad.