“Dialogar sobre qué buscamos con la educación”

Carolina Pallas, consejera designada de la ANEP.

Es profesora de filosofía, tiene una extensa trayectoria en los ámbitos de debates educativos y trabajó intensamente en el armado del programa de gobierno para el período 2025-2030. Sostiene que se debe gobernar dialogando con la gente, y que se debe prestigiar a los docentes. 

¿Cuál es tu formación? 

Estudié filosofía en el IPA. Fue la primera carrera que empecé y terminé, porque también había empezado la formación magisterial, pero opté por filosofía. Tengo, además, estudios de posgrado, en la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación donde realicé la Maestría de Ciencias Humanas, opción Filosofía Contemporánea. En el ámbito disciplinar, me he dedicado a la filosofía de la práctica, que incluye lo que comúnmente llamamos ética y filosofía política.

¿Por qué pensás que te eligieron para el cargo?

Estoy agradecida por la confianza y vengo con un compromiso fuerte y profundo de poner el pienso y el hacer para lograr cambios construidos colectivamente. La manera en la que el gobierno se propone realizar la política pública, viene de la mano de una mirada de país y de una metodología que se relaciona a la participación social. Eso implica tener capacidad de escucha, de buscar acuerdos y de mirar aquello que tenemos en común, para tratar de resolver las diferencias.

¿Cómo tendría que darse el proceso de participación de los distintos actores de la educación?

De acuerdo a los lineamientos del programa de gobierno, donde la participación social tiene un lugar fundamental. Eso tiene que ver con cómo se construye la política pública. En la construcción programática se sostenía que “el camino más corto es con la gente” y esto significa que en los cambios debe formar parte la ciudadanía, dependiendo del tema y con una amplitud del debate. En el caso de la educación, hay diferentes instancias y formas de participación. Hay un lugar clave que es donde se produce el acto educativo: los centros, las instituciones educativas, donde es importante la participación de todos los involucrados en lo cotidiano, por ejemplo, los docentes,  las familias, los vecinos, los estudiantes. 

Ahí hay una participación directa, y los temas en los cuales se debe formar parte, se relacionan a la convivencia cotidiana. Hay otro nivel de participación relacionado a lo académico, más disciplinar, y que tiene que ver con los programas.

Se plantea la participación de los docentes…

Los docentes participan en el centro educativo, en la convivencia cotidiana, en lo que pasa día a día en la institución, pero hay un aspecto profesional que consiste en el qué y cómo enseñar cada disciplina, y eso está vinculado a un saber experto de los docentes, y sus selecciones cotidianas sobre los distintos aspectos de la enseñanza. Hay otro nivel de participación que se da a nivel de las asociaciones de profesionales, las asociaciones de profesores, que en los últimos tiempos han tenido una fuerte voz en la reforma curricular. 

También debemos dialogar sobre qué buscamos, como sociedad, con la educación. La sociedad puede discutir y llegar a acuerdos amplios, a consensos, sobre  cuál es el bien común al que aspiramos como sociedad. La discusión sobre qué tipo de salud queremos la podemos tener todos los ciudadanos, pero  la metodología concreta, o el medicamento concreto es una cuestión de expertos de la medicina. Acá hay un nivel de expertise que implica la tarea docente, y eso hay que volver a prestigiar.

¿Y eso cómo se logra? porque la formación docente también presenta cierta crisis, faltan docentes de muchas asignaturas. una crisis histórica en algunas asignaturas.

El prestigio de la formación docente tiene que ver con qué tipo de formación les brindamos a los docentes. Cuando decimos que somos profesionales de la educación, implica un saber propio, un conocimiento propio, y cuando pensamos en el “ser docente” hay un saber disciplinar que el resto de los profesionales no tienen, vinculado a lo pedagógico, y lo didáctico. Porque el docente no solo aprende las disciplinas, sino que aprende cómo enseñar esas disciplinas, y no es lo mismo enseñar matemática que  literatura. Ser profesionales implica  tres cosas: el saber específico, una práctica propia de una profesión, en este caso es el enseñar, y también una autonomía del  sujeto profesional, aquel que pueda decidir sobre su obrar específica. Reconocer esa tarea me parece que es un camino. Ahora, hay un desafío que está teniendo la formación en educación, que es reconocer su carácter universitario, lo  que implica investigación. Los docentes investigamos, analizamos, evaluamos nuestras prácticas cotidianas, evaluamos cómo evaluamos, evaluamos cómo enseñamos, y esas prácticas se pueden sistematizar. También tenemos la extensión universitaria. Hay un debe: lograr la Universidad de la Educación, y esto es un tema parlamentario.. 

 ¿Tiene que haber un gobierno en esa estructura universitaria?

El programa de gobierno es muy claro, se van a buscar todos los acuerdos para crear una universidad de la educación pública, autónoma, cogobernada y de carácter nacional. Eso es a lo que tendemos. Las experiencias anteriores de creación de nuevas universidades, como es la UTEC, han costado el cogobierno. 

Durante el periodo anterior, hubo una promesa sobre obras nuevas, liceos que no se concretó. En La Teja se pide un liceo de bachillerato ¿qué se plantea para este periodo? 

Para tener un plan de organización territorial de los centros educativos, tenemos que conocer la realidad del territorio. Esa información es necesaria para poder planificar. Nos consta que hay una necesidad, por ejemplo en La Teja, eso implicaría una obra nueva, cómo debe ocurrir en otros lugares. Con respecto a lo edilicio, no solo hay que pensar en obras nuevas, pero no obras nuevas para llenar los números, sino que hay que hacerlas en los lugares donde se precisan. También será necesario un gran esfuerzo de ampliación de centros, ya que tenemos como objetivo aumentar el tiempo pedagógico. Hay que discutir cuáles son los formatos de aumento del tiempo escolar, que incluye los comedores, porque en cuanto a la alimentación, tenemos acuerdo con los sindicatos de la enseñanza que es importante en educación media, donde tenemos un debe, porque las personas no solo comemos cuando vamos a Primaria.