Juan Manuel Blanes en la mira por Alejandra Waltes

El rescate del olvido de más de un centenar de Artistas Plásticas vinculadas al TTG, la revisión y nuevas miradas sobre la obra de J. Torres García y su alumnado, la aparición en Inglaterra de la obra “Gaucho en el campo” y de un boceto en el Uruguay de J.M.Blanes han hecho de estos, tiempos fundamentales para las Artes Plásticas nacionales. Creo que aún no es medible el alcance de estos hechos que se han dado en los últimos meses, hechos que obligan a revisar la Historia del Arte uruguayo y a reescribirla.

En febrero del 2023, Soledad Gago escribía una nota muy completa “Descubren en Inglaterra un cuadro de Juan Manuel Blanes: su primer dueño lo tuvo en su casa hasta 1921” para el diario El País. La pintura denominada «Gaucho en el campo» (¿1875?), un óleo sobre tela de 112 x 128 cm, fue subastada en Toovery´s y adquirida por un compatriota que generosamente, la prestó para ser exhibida primero en el MACA (enero del 2024) y después en el MNAV (abril del 2024). El 7 de febrero de este año se presentó al público un supuesto boceto de Juan Manuel Blanes, sin firma, que se suma al acervo del Museo de Bellas Artes Juan Manuel Blanes. A simple vista se trata de dos imágenes parcialmente superpuestas que son posiblemente el retrato de María Linari, esposa del pintor, y el rostro de José Artigas, ubicado en forma inversa. La primera imagen de este boceto apareció en el catálogo “Platería Criolla, Militaria y Documentos históricos” en diciembre del 2020 de Zorrilla Subastas con el número de lote 570. La obra fue adquirida y donada por la Comisión del Patrimonio Cultural de la Nación del Ministerio de Educación y Cultura (MEC). El cuadro perteneció a una familia que lo tuvo siempre en su patrimonio, y lo llevó a Zorrilla convencida de que era un Blanes. El presidente de la Comisión, el experto Willy Rey, lo vio y resolvió su compra. Los documentos que acompañaban la obra son: una imagen de J.M.Blanes y su familia, una de María Linari y una nota escrita en febrero del 2020 que dice “Retrato inconcluso (con capucha) de la italiana María Linari en sus últimos años, esposa del pintor Juan Manuel Blanes (1830-1901). Realizado este sobre un primario estudio de la cabeza perteneciente al retrato del Gral. José Artigas ante la puerta de la Ciudadela; el que fue encargado en el año 1884. El retrato de María Linari de Blanes, cuyas medidas son: largo 28 cmts. X alto 35 cmts., fue realizado entre los años 1884 y 1888, cuando la referida Sra. contaba entre 61 a 65 años de edad (había nacido en 1823), falleciendo esta el 11 de febrero de 1889.” El 13 de febrero fui recibida en el Museo por Claudia Barra, Conservadora Restauradora de Pintura Cabellete y Elisa Pérez Buchelli, Historiadora del Museo Blanes quienes dieron detalles desde su mirada experta. Barra pone a nuestro alcance una pormenorizada descripción de lo hecho hasta ahora por el personal técnico del museo: “Según los relatos de los custodios previos, el retrato femenino podría tratarse de María Linari, la esposa del artista y el boceto masculino podría ser José Gervasio Artigas. Estas atribuciones tanto sobre el autor como sobre las personas retratadas las consideramos como una hipótesis a investigar en primera instancia por parte de equipo técnico del museo. Es así que la pintura nos generó varias interrogantes: ¿es Juan Manuel Blanes su autor? ¿el retrato femenino es María Linari su esposa?, ¿el boceto masculino es José Gervasio Artigas?, ¿por qué vemos ambos rostros al mismo tiempo?, ¿Hay una pintura debajo y otra arriba? ¿Cuál es la pintura que el artista quiso mostrar?, ¿Cuál es el estado de conservación? Entendimos que la falta de información con que ingresa al museo y las preguntas que surgen en torno a la obra justifican iniciar una investigación sobre su estado de conservación, la técnica pictórica y el proceso creativo, las características estilísticas y de composición, y el contexto histórico de la obra, con el propósito de ir respondiendo a las preguntas planteadas. Esta es una tarea interdisciplinaria y por lo tanto se enriquece con los conocimientos de la conservación, de las ciencias naturales como la química y la física, y de las ciencias históricas. En un primer acercamiento hicimos una visualización del estado de conservación, que ampliamos, con ayuda de lupas y microscopio, para examinar las pinceladas, el patrón de las grietas, las características de la tela buscando indicios que pudieran relacionarse con el período en que pintó Blanes y con otras obras de su autoría. Pudimos ver ciertas similitudes con la obra de Blanes tanto en la técnica, en la paleta de colores, en el estilo pictórico, y también en la aparente antigüedad de algunos de los componentes que bien podrían coincidir con una pintura del siglo XIX. Pero todas estas observaciones deben ser complementadas con otros estudios. Las ciencias avanzaron mucho con tecnologías que se aplican al estudio del arte y complementan los estudios visuales, así es que, usamos la radiación ultravioleta, para estudiar las fluorescencias del barniz y de algunos pigmentos y aglutinantes y pudimos detectar restauraciones previas muy invasivas, con muchos y muy notorios repintes, (que son agregados de pintura sobre el original) que se destacan como manchas oscuras en la exposición a los rayos UV. Uno de los sectores seriamente afectados por los repintes es la zona baja del rostro femenino, en especial el sector de los labios y esto hace que no podamos apreciar la obra original. También hicimos radiografías para ver que hay debajo de las capas superficiales, con especial atención a las capas que están debajo del rostro femenino, buscando la posibilidad de completar la parte del rostro masculino no visible que podría estar debajo. Los rayos X atraviesan las capas de barniz y ciertas capas de pintura, revelando lo que está oculto. Pero, no descubrimos qué hay debajo del rostro femenino, porque la capa de pintura bloqueó los rayos X. Este bloqueo nos hace pensar en que hay pigmento blanco de plomo, pigmento usado hasta aproximadamente 1930 -1940 y que luego podremos confirmar o descartar haciendo análisis de pigmentos. De todas formas, las radiografías arrojaron mucha información sobre el estado de conservación de la pintura y así de su historia. Gracias a esto, descubrimos que la obra está más dañada de lo que parecía a simple vista, observamos cortes en muchos sectores y faltantes de lagunas en la tela. En suma hasta esta etapa inicial de la investigación, NO se descarta que sea una obra de Blanes pero es IMPORTANTE tener presente que para avanzar necesitamos contar con más estudios y algo fundamental que es una gran cantidad de otras obras de Blanes estudiadas como para poder hacer comparaciones que tengan validez. Y este es un trabajo que recién estamos iniciando. También podemos afirmar que el rostro masculino es un boceto inconcluso y que se encuentra por debajo del femenino, y que la pintura sufrió la eliminación de una capa de color negro que cubría el torso y la cabeza de la mujer, y esto no es una restauración sino una eliminación de pintura original. Como siguiente paso, tenemos previsto hacer fluorescencia de rayos X, para la identificación de algunos de los pigmentos y cargas y a medida que vayamos avanzando en la investigación, podremos definir qué otros estudios se justifican realizar.” Perez, a su vez, contextualiza, da un marco histórico a J.M.Blanes y a su obra “(…) fue uno de los primeros artistas profesionales de Uruguay, y a través de sus obras más destacadas logró consagrarse como uno de los pintores latinoamericanos del siglo XIX más influyentes del cono Sur. Pintó un amplio repertorio de imágenes que impactaron en diversos públicos, tanto en el Uruguay como en la región. Para Blanes la pintura tenía una utilidad concreta: consolidar un imaginario visual para la historia y orientar la moral. Por ello concibió y pintó numerosos cuadros de tema histórico, escenas campestres, retratos y alegorías, los cuales simbólicamente contribuyeron a la legitimación de la identidad nacional en construcción. (…) Con Blanes la historia nacional se convirtió en tema, con su obra despunta la pintura republicana y por ello fue llamado “el pintor de la Patria”. La seriedad historicista con que realiza su tarea queda demostrada en su correspondencia, buena parte de la cual está destinada a solicitar información minuciosa para documentarse antes de emprender sus cuadros históricos. También el paisajismo uruguayo se inaugura con Blanes. No recurre al paisaje en un sentido estricto, ya que éste constituye para él en telón de fondo de sus escenas y nunca en protagonista. Alcanza también renombre a través del género retratístico inscripto en estricta escuela academicista.” En los próximos meses tendremos la oportunidad de recorrer el proceso creativo de este emblemático artista.

Imagen de obra