QUE LOS MÁS PRIVILEGIADOS SEAN CADA VEZ MÁS PRIVILEGIADOS
El año 2020 ya se está yendo con un saldo negativo para los estudiantes. Si todo sigue así en 2021, mientras los colegios privados continúan con clases presenciales en horario completo y condiciones sanitarias adecuadas, quienes asisten a la escuela pública continuarán viendo seriamente afectado su aprendizaje. Una cosa son las escuelas, otra cosa son los colegios. Y no es un problema de palabras.
Como se muestra en el cuadro adjunto, el 81% de quienes cursan enseñanza primaria pública van a escuelas o centros equivalentes. Menos del 20% concurren a colegios.
MATRICULA 2019 EDUCACIÓN PRIMARIA PÚBLICA Y PRIVADA
| TOTAL | PUBLICA | % | PRIVADA | % | |
| EDUCACIÓN INICIAL | 118.922 | 91.592 | 77 | 27.330 | 23 |
| COMÚN | 292.787 | 242.873 | 83 | 49.914 | 17 |
| ESPECIAL | 7.956 | 5.811 | 73 | 2.145 | 27 |
| TOTAL | 419.665 | 340.276 | 81 | 79.389 | 19 |
FUENTE: http://www.anep.edu.uy/monitorRepo/Documentos%202019/ESTADO%20DE%20SITUACI%C3%93N%202019%20FINAL.pdf
En una encuesta realizada por los padres nucleados en “Familias Organizadas de la Escuela Pública” en la que relevaron 128 grupos diferentes de 58 escuelas del país se puso de manifiesto que, mientras la asistencia fue optativa, el promedio de concurrencia fue de 80% en el quintil superior de ingresos y de 63% en el quintil más bajo (los más pobres). Asimismo, contabilizaron que, en una semana tipo, los alumnos pierden el 54% de las horas de clase.
A noviembre de este año, quizá con mejores índices de asistencia por la obligatoriedad resuelta el 13 de octubre, y sin cambios hasta la finalización de las clases, las escuelas seguirán con el esquema de dos días de clase una semana, y tres días la semana siguiente. La pérdida evitable de clases continuará a pesar de los reclamos de médicos e investigadores.
Fuente: Familias Organizadas de la Escuela Pública.
Si bien las directivas centrales del gobierno son de aplicación general para el conjunto de la enseñanza primaria, su aplicación difiere enormemente. El 23 de setiembre del 2020, ANEP publicó el comunicado Nº 114 “Recomendaciones para optimizar el tiempo del último trimestre del año” que, entre otras recomendaciones plantea: “optimización de espacios existentes…a efectos de aumentar el tiempo presencial de los estudiantes” y más adelante “replanificar los contenidos a enseñar, jerarquizando Lengua y Matemática…”.
Ya desde la finalización de las vacaciones de julio la educación privada dio un salto en calidad y horas de enseñanza presencial. Colocaron mamparas, organizaron apoyos psicológicos, reforzaron el personal auxiliar, compraron los insumos necesarios, adecuaron sus gimnasios. En diferentes formatos sus alumnos gozan de la carga horaria presencial anterior a la pandemia para alcanzar los objetivos previstos en los planes, sin descuidar los requerimientos sanitarios. La escuela pública continúa prácticamente sin cambios, con menos del 50% de horas de clase en relación con lo normal. En esas condiciones los colegios tienen y tendrán mucho menos que replanificar, pues ya tuvieron la posibilidad de recuperar y ponerse al día en el cumplimiento de los objetivos de cada curso.
Por su parte las escuelas sí que tienen mucho para replanificar, dadas las pérdidas de horas de clase. Lo perdido en todo el año es irrecuperable, a pesar de que hubiera sido posible acotar dichas pérdidas. Estas pérdidas no son solo curriculares: los efectos de la no concurrencia se manifiestan en problemas de diversa índole en los niños y en sus familias. Las pérdidas educativas y los problemas de salud han sido los más divulgados, pero importa conocer también que el 77% de los encuestados por los padres organizados debió hacer cambios laborales para dedicar más tiempo a cuidar a sus hijos escolares. La situación es estresante y caótica al tener que buscarles material y tratar de que aún continúen dedicando tiempo a la lectura, escritura o ejercicios. Los niños no logran adquirir hábitos para asistir a la escuela y realizar las tareas, no pueden socializarse debidamente. Se han detectado casos en que adolecentes tienen que faltar al liceo para cuidar hermanos menores cuando no concurren a la escuela y sus padres trabajan…
La ANEP define que se tomen medidas para “aumentar el tiempo presencial de los estudiantes”. Y en lugar de ponerse a la cabeza de la enseñanza pública para impulsar tal directiva, no brinda ideas concretas, no exige recursos para que las escuelas tengan las condiciones para poner en práctica sus disposiciones, y sí rechaza sin mayor análisis técnico las propuestas concretas que se le proponen. Las escuelas carecen de partidas suficientes para la compra de insumos, hay escasez de auxiliares de limpieza, subsisten problemas de infraestructura edilicia…pero poco importa.
Un ejemplo de las trabas de la administración de la enseñanza es el dictamen sobre la propuesta de la escuela Experimental de Malvín, en Montevideo. Arquitectos padres de escolares de dicha escuela elaboraron un proyecto de uso de mamparas al igual al aprobado en algunos colegios. El proyecto era muy cuidadoso, no solo en la racionalización del uso de los espacios sino también de la ventilación necesaria para minimizar los riesgos sanitarios. En algunos colegios bastó con la opinión de un técnico prevencionista privado. De acuerdo a lo manifestado en la nota de respuesta, solo con la opinión de un médico y de ningún arquitecto, se niega la autorización aduciendo problemas de ventilación. Podría haberse intercambiado ideas con los arquitectos que presentaron el proyecto, podría haberse consultado a los arquitectos de la ANEP. Pero no. A pesar de los reiterados informes de otros médicos y especialistas acerca de que los niños se contagian poco y además transmiten poco, haciendo una lectura no técnica de los planos presentados, se opta por la negativa. Ni se aportan ideas, ni se analizan debidamente los proyectos presentados, ni se buscan alternativas o ajustes para alcanzar alguna solución.
Por si esto fuera poco, desde el mes de setiembre existe un expediente en el que se solicita a distintos departamentos del Consejo de Primaria opiniones acerca del uso de la mampara. Al 31 de octubre solo se conocen expresiones de autoridades de que se debe agilizar su tratamiento. Un doble criterio del Consejo hace posible la actuación privilegiada de los colegios y la inacción ante las necesidades de las escuelas.
Desde ayer se debería haber comenzado a programar y ejecutar lo necesario para que el año lectivo 2021 no sea tan lamentable como el 2020. Con los conocimientos y experiencias adquiridos tenemos elementos más que suficientes como para minimizar los riesgos e incrementar el nivel de la enseñanza. El gobierno ya tiene resuelta la situación del 19% (los colegios) que generalmente incluye a sus hijos, sobrinos y nietos. Esa cifra de 19% que continúa incrementándose en perjuicio de la enseñanza pública, incluye alumnos cuyos padres –en una suerte de sálvese quien pueda- disponen de una parte sustancial de sus ingresos por mes y por hijo para salvarse de la debacle. Pero olvida -o mira para otro lado- que al promover de hecho esas soluciones individuales se desentiende de la suerte del 81% de los niños del país y los deja a la deriva.
El presidente de la Asociación Rural Gabriel Capurro definió con precisión el pensamiento dominante en el gobierno: “Aunque todos podemos estar de acuerdo en que la desigualdad extrema no es deseable, la realidad es que la desigualdad de ingresos va a existir siempre por la propia naturaleza humana, y es justo que así sea.” [i]
Por supuesto que tales expresiones tienen su correlato en la enseñanza. Puede que para algunos sea un daño colateral. Pero si no se revierten tales posiciones, si no se toman medidas urgentes, el aumento de la brecha será irrecuperable y el daño será irreversible para el futuro del 80% de los niños uruguayos y con ello para el futuro del país.
[i] Discurso en el cierre de la Expo Prado 2020.
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