Editorial de VOCES:La otra selección

 

La semana que viene comienza el mundial de futbol y el país se paraliza.

Seguramente desaparecen muchos de los temas que hoy están sobre la mesa.

Por un mes se hablará poco de la seguridad, la educación o la rendición de cuentas.

Los ánimos estarán en alza según avance la celeste en los diversos partidos.

Todo parece apuntar a que la selección puede hacer un buen papel en Rusia.

Mientras tanto, se arma una selección que parece no ser exactamente juvenil.

Nos referimos a los convocados de los diversos partidos para el torneo de 2019.

Las novedades pican por las nuevas incorporaciones de algunos grupos políticos.

Novick  recluta a Zubía, un puntero derecho que habla mucho en la cancha.

La cuestión es que si el Partido de la Gente sigue prometiendo titularidades va a estar

bravo poder colocar a todos sus jugadores en los puestos que consiga con sus votos.

Una parte del partido Colorado aguarda que Ernesto Talvi  acepte ser el nuevo capitán.

Mientras tanto Sanguinetti como viejo DT, vuelve al ruedo tratando de marcar la cancha,

porque hay muchos jugadores veteranos que ven peligrar sus ubicaciones con el outsider.

En el Partido Nacional, Larrañaga moviliza a su barra brava para agitar a la hinchada  y tratar

de recuperar el capitanato del cuadro que le fue arrebatado por un joven goleador hace años.

Los otros jugadores blancos se entrenan en la concentración para lograr puestos relevantes y

algunos como Alonso o Dastugue desisten de presentarse al tribunal arbitral que los convoca.

El Frente por su parte vacila en definir su plantel, porque algunos jugadores históricos sueñan

con volver a la cancha, a pesar de estar fuera de forma, y ante los grandes goleadores, los más

nuevitos arrugan, sin animarse a decir que la titularidad les corresponde de una buena vez.

Lo que sí  está claro, es que en la lista de desafectados a la selección, Sendic es número puesto.

Los partidos chicos, se arreglan como pueden, pero les faltan cracks y eso se nota mucho.

Uruguay respira política y los partidos están siempre en el candelero, pero les aseguro que se

nos vienen unas semanas de vacaciones, donde la agenda pasa a correr detrás de una pelota.

Aprovechen el recreo y mientras tanto a quedar afónicos con un: “Vamo la celeste nomás”

 

Alfredo García