RAÚL EBERS MERA fue, para mí, “héroe de la radio”. Porque cuando yo tenía seis o siete años, empecé a amar el basquetbol, pero sin verlo, escuchándolo (a escondidas de mamá que aspiraba que me durmiera temprano) en CX 18 Radio Sport, con los relatos de Jorge Martínez Viaña
y los comentarios de Gerano Carleo. Y en base a esos relatos, comencé a construir mis ídolos: el Canario Chelle, Moglia, Lombardo, Costa, Macoco Acosta y Lara, y tantos y tantos otros. En mi casa se respiraban aires atenienses.
En aquellos años, mis abuelos maternos vivían en La Comercial (Defensa 1872) en una casa con los típicos balcones de ese barrio. Yo salía – solo – a jugar al basquetbol en la vereda con mi pelota de goma, y el balcón hacía las veces de tablero y aro. Mientras jugaba, transmitía el partido imitando a Martínez Viaña. Aquél cuadro de mi niñez se integraba con Mera, Moglia, Macoco Acosta y Lara, Costa y yo. Vaya a saber por qué dejaba afuera a Scarón, Matto, Demarco, Cortés, Olascoaga, Blixen…
¡Imitando a Martínez Viaña, yo relataba cómo “¡Macoco se la pasa a Moglia, juega para Demarco, éste a Mera, gran pase para Jorgito, entra velozmente de sillita, dobleeee!” y la pelota entraba al balcón (el aro). Claro está que yo no tenía la menor idea de lo que significaba “tirar de sillita», pero así lo transmitía el relator.
Es que Ebers Mera era único. ¡Debutó en primera división con 13 años!, Salió campeón con Stockolmo con 18 en 1954, medallista olímpico en Melbourne en 1956, campeón sudamericano con la celeste en 1953 y 1955. Y lo que poca gente sabe, fue el primer basquetbolista uruguayo en tirar con una mano.
La historia -según él mismo me contó – es así: en aquellos años, había un gran técnico de basquetbol llamado Olguiz Rodríguez. El hombre era muy estudioso y viajaba periódicamente a Estados Unidos para estar bien al día con las innovaciones y prácticas que se realizaban en la meca de este deporte. Un día, le comentó a Mera que, allá, se tiraba al cesto con una mano y le preguntó si el se animaba a aprender esa técnica. Naturalmente que aquel chiquilín que derrochaba calidad y talento, le dijo que sí. Entonces, Olguiz le puso a la altura del personal un libro abierto donde se mostraba como era la técnica del tiro (“a la americana” relataría después Martínez Viaña).
Ebers Mera (porque lo de Raúl yo lo supe hace relativamente poco) se retiró muy joven con menos de 30 años. En aquellos años, el basquetbol era amateur. Incluso existía un Tribunal en la FUBB que investigaba los posibles casos de profesionalismo, y si algún jugador era “sentenciado” por el Tribunal (que por otra parte fallaba por convicción) las sanciones al justiciado eran muy severas.
Entonces, en el momento de construir una familia, trabajar muchas horas, no tuvo otra opción que dejar la práctica activa (no de jugar, porque con sus 83 años lo sigue haciendo muy bien).
»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»
Bien dice la canción que “la vida tiene sorpresas”.
A mediados de la década del 60, yo jugaba (bueno, es un decir) en Miramar. Un día, estaba practicando tiro al cesto – solo – en nuestra cancha que estaba en la calle Las Heras frente a la Facultad de Odontología. De pronto, siento una voz, amable pero firme, que me dice algo así como:
“Pibe, la técnica del tiro está bien, pero no mirás el aro. Miralo, y vas a ver como empieza a entrar. Cuando me di cuenta quién era que así me aconsejaba, la sorpresa no me dejó ni moverme. Mi crack de la radio, don Raúl Ebers Mera estaba allí hablándome. No lo podía creer. Sucedió que había sido nombrado Director Técnico de Miramar, y yo no me había enterado.
»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»»
Pasaron muchos años. En agosto del año pasado recibo una llamada de mi amigo, el Dr. Eduardo Lombardi para invitarme a unirme al grupo de la Unión de Veteranos de Basketball del Uruguay (UVBU). Pero Eduardo – le dije – hace más de cincuenta años que no juego al basquetbol. “Vos vení – me respondió – vas a ver que es un ambiente bárbaro”.
Y allí me encontré nuevamente con /Raúl Ebers Mera que, a sus 83 años, sigue dictando cátedra. Cuando jugás con él como compañero tenés que estar muy atento, porque es capaz de meterte un pase que vos no esperás. Cargado de gloria deportiva, tiene una humildad de esas que uno ve que son auténticas y es un lujo sentir sus comentarios sobre el basquetbol de hoy.
Pero hay gente que siempre está dando sorpresas, y permanentemente dan ejemplo de vida. Ahora resulta que junto a Daniel Dupuy, Raúl Arnelli, Juan Carlos Molins, Walter Bauzá, Hugo Cativelli, Alberto Feltrini y José Moreira, don Raúl Ebers Mera concurrirá a Finlandia, a competir en el Campeonato Mundial de Basquetbol de jugadores de más de 80 años.
Y creo que está bien decirles desde ya: ¡SALUD CAMPEONES!
POR MÁS PERIODISMO, APOYÁ VOCES
Nunca negamos nuestra línea editorial, pero tenemos un dogma: la absoluta amplitud para publicar a todos los que piensan diferente. Mantuvimos la independencia de partidos o gobiernos y nunca respondimos a intereses corporativos de ningún tipo de ideología. Hablemos claro, como siempre: necesitamos ayuda para sobrevivir.
Todas las semanas imprimimos 2500 ejemplares y vamos colgando en nuestra web todas las notas que son de libre acceso sin límite. Decenas de miles, nos leen en forma digital cada semana. No vamos a hacer suscripciones ni restringir nuestros contenidos.
Pensamos que el periodismo igual que la libertad, debe ser libre. Y es por eso que lanzamos una campaña de apoyo financiero y esperamos tu aporte solidario.
Si alguna vez te hicimos pensar con una nota, apoyá a VOCES.
Si muchas veces te enojaste con una opinión, apoyá a VOCES.
Si en alguna ocasión te encantó una entrevista, apoyá a VOCES.
Si encontraste algo novedoso en nuestras páginas, apoyá a VOCES
Si creés que la información confiable y el debate de ideas son fundamentales para tener una democracia plena, contá con VOCES.
Sin ti, no es posible el periodismo independiente; contamos contigo.
Conozca aquí las opciones de apoyo.