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ENRIQUE “CACHETE” ESPERT: Los políticos son todos mentirosos

ENRIQUE “CACHETE” ESPERT: Los políticos son todos mentirosos
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La sede de DAECPU era un hormiguero de gente que entraba y salía ese mediodía cuando nos recibió en su gran oficina el presidente de la institución. Lo agarramos con ganas de hablar y durante noventa minutos contestó sin dramas todas nuestras preguntas. Polémico, irreverente, hablando de todo y de todos, el famoso Cachete no se guardó ninguna. Con ustedes la entrevista más políticamente incorrecta de nuestra trayectoria.

Por Jorge Lauro y Alfredo García / Fotos Rodrigo López

¿Cómo viene el Carnaval?
Hay algunas cosas raras como el concurso. ¿Cómo van a hacer eso, m´hijo? Están destrozando cosas que están hechas de toda la vida. Quieren hacer innovaciones. ¡Está loca esa mina! Está loca, eso no es pa’ ahí, loco. Un concurso de putos en un concurso de misses de carnaval.

Eso, ¿lo vas a seguir diciendo?
Y lo digo. Yo no los discrimino, pero eso no es de ellos.

Te van a hacer un juicio.
No me van a hacer nada. Ellos, si quieren, que se hagan un concurso para ellos. Pero esto es un concurso de misses y ellos no entran en las misses. No es discriminarlos. ¡No entran, muchachos! Está claro por dónde lo digo.

En Brasil, ¿cómo es? Y en Brasil hay un concurso pa’ gays, un concurso pa’ mujeres… Escuchame… ¿Cómo no va a haber límite de edad?… ¿Se va a presentar mi abuela? ¿Estamos jodiendo? Lo hacen para perturbar, para decir que son innovadores. ¿Innovadores de qué? Que limpien la basura de la calle, que para eso pagamos todos los meses. ¡Eso es innovación! Porque desde que está el Frente Amplio hay una mugre en la calle que sabés lo que es…

Ah!..pero antes también había.
Pero no como ahora.

La primera medida de Tabaré fue eliminar los basurales aquellos que eran…
¡Qué va a eliminar! Si fueron peores.

Hoy estás de contra.
No es que estoy de contra, si yo soy amigo de Tabaré. Estoy todos los días con Tabaré.

Venís bravo hoy.
¡Pero te calentás, bo! Nosotros pagamos ochenta mil dólares por el Teatro de Verano, y entrás a pie, los agujeros de los tejidos los pasás caminando. Yo no te miento con una cosa así, sos loco.

¿Les da ganancia el Teatro de Verano?
Los premios salen de ahí, porque estamos bien administrados. ¡Cómo no va a dar ganancia! Desde que entramos hasta ahora, los premios están subiendo.

¿Cuánto gana el primer premio de murga ahora?

No sabemos hasta que no recaudemos. Es en base a la recaudación, y después hay un tanto por ciento para cada categoría.

¿Estás conforme con los jurados que se eligieron este año?
Y hasta que no vea el resultado…

Pero se supone que eligen gente que sabe, ¿O no?
Saben y no saben. Pusieron un muchacho, y lo dejaron para la prueba, …que nunca fue jurado. Lo pusieron en letra, y letra es muy difícil, y el tipo escritor no es, nunca hizo un libro, nunca hizo nada. Vamo’ a ver. Pertenece a las Ovejas Negras, también.

Federico Graña, debe ser.
Sí, Graña. Esto me parece que hay que hacerlo más sencillo y con gente que sea del palo de cada cosa. ¿Entendés? Parece que no pero hay que reventarse todo para que el jurado sea bueno, porque los muchachos gastan mucha guita.

Y esfuerzo.
Esfuerzo ni sabés, pero la guita que ponen… Y si a un tipo que está para estar en un lugar, lo tirás para allá abajo… lo destrozás. Esto no es para jugar, esto no es carnaval de niños. Hay inversiones de cincuenta o sesenta mil dólares.

Vos llegaste a pagar hasta ochenta, con aquella de Venecia.
Yo he hecho barbaridades.

En varios campos…
Pero he hecho barbaridades gastando plata en el carnaval.

Ahora no salís porque estás de presidente.
Sí, queda mal. Todo el mundo hace suposiciones y prefiero ser claro. Hay muchas cosas que, estando de presidente, si no sos un tipo honrado… las digitás.

¿Se digitaba mucho el tema de los jurados? Siempre se habló de que: “Aquel,camina bien en el teatro”.
¡Qué voy a caminar bien!… ¡He sacado cada murga, muchacho! Tengo doce primeros, dieciocho segundos, dos terceros, dos cuartos y un quinto. ¡Hablan de la Catalina!… Catalina hace dos años entró décima. ¡Yo en mi vida supe lo que es entrar décimo! Y entrar quinto es un accidente. Y ahora no tanto, ahora la categoría es floja, pero cuando salía yo había murga y murga. La Milonga Nacional, La Nueva Milonga, Los Patos Cabreros, había cualquier cantidad de murgas.

Sí, la competencia era durísima.
¡No va a ser dura! Ahora veo que vienen nuevitos, que son del teatro y de aquí y de allá, y se presentan en revista. Los del teatro, llegan al carnaval con unos vientos bárbaros en la camiseta y marchan todos, no pasan ni la prueba.

Pero de a poco han ido metiendo baza.
Han metido profesionales para llevarse la guita. ¡Vienen con coreografía y con esto…y esto otro! Pero vos traés una revista… y es gente de teatro: ¡No figura!
¡Es bravo! No te creas que es papa. La gente que está hecha en esto se defiende. Venir al carnaval no te creas que es venir a concursar. ¿Cuántas comparsas hay? Sesenta o setenta que hacen solo las Llamadas. Deciles que vengan a concursar…

Claro, la mayoría no va a concursar.
¿Y qué van a concursar? ¿Sabés lo que sale? ¿Sabés lo que tenés que tener? Bailarines, coristas, esto y lo otro.

De afuera la gente ve como que el mundo del Carnaval fuese una guerra. ¿Es tan así?
¿Cómo no va a ser? Quiere ganar todo el mundo, y todo el mundo se mata por hacer las cosas mejor.

Ahora, ¿Qué es esa cuestión de ganar? Porque tampoco es tanta guita. ¿Es el prestigio?
¿Y qué te parece?… ¿Cuántos primeros seguidos lleva Pinocho?… ¿Qué te parece?

Pero cuando no mete uno, arma cada bardo bárbaro.
Eso no tiene nada que ver. ¡Es un loco bárbaro! Todo eso es aparte. Pero la prueba es que todo el mundo quiere ganar. ¡Sos loco! En carnaval, la gente se tira a la calle a sacar un conjunto y andá a decirle a un tipo que está mal ese conjunto. Porque a veces hay que decirlo: “Muchachos, ¿no hay gente con ustedes que tenga ocho o diez años de carnaval? ¿Nadie les dice que ustedes están mal? ¿No te das cuenta que están mal?” El otro día fueron dos comparsas, eran horribles, y ellos dicen que están bien. Anoche fue otra que estaba mal también. Desafinaban que era un desastre y el carnaval ahora está mucho más profesional. Nosotros hicimos una prueba hasta por fuera de concurso. Porque, por ejemplo, hay muchachos que hace ocho o diez años salían y eran unos fenómenos, salían de cómicos y hacían reír. El más viejo de todos salvó la prueba, Guarnerio. Pero había otro muchacho, que hace ocho o diez años salía y trabajaba bien, y ahora está todo quebrado. Vos venís a dar un espectáculo… ¡no entreverés la panza si tenés hambre!

¿A quién ves este año perfilado, te gusta alguna? ¿Vas al Teatro?
Soy el primero que llego al teatro y el último que me voy.

Por algo será, algún negocio hacés ahí.
Tengo que estar mirando todo. Aparte… ¡las veo yo! Porque la gente te dice una cosa y después no es. Las miro yo, y si me clavo, me clavo yo. La que está para repetir es Pinocho otra vez. La vi en la calle, en dos o tres tablados. Tiene una tipa que hace de Juana de Ibarbourou, que ¡cómo trabaja! La sacaron del teatro, creo que fue figura de una revista hace un año o dos. Un valor bárbaro. Y después, son categorías que están bastante parejas. Ayer fueron los Jacquets, los vi muy bien.

¿Y en murga quién está?
Los Timoteos, Los Patos también. Hay otras que tienen cosas viejas, hay murgas que repiten cosas. No podés estar repitiendo, tenés que sacar un repertorio que sea nuevo.

Todo el mundo está diciendo que ninguna de las murgas critica al gobierno. ¿Es cierto eso?
Ahora empezaron. Hay que ser medio descarado ahora para no criticar. La verdad. Antes seguían tirándole mierda a Jorge Batlle, ahora Jorge Batlle hace veinte años que no está más. Me da lástima por el Taba. Yo soy amigo de verdad, de Tabaré.

¿Cuándo te hiciste amigo? Vos no eras amigo cuando asumió en 2005…
En la Intendencia y todo, venía a la otra casa. Era médico del sindicato de nosotros, los canillitas. ¡Cómo no voy a ser amigo de Tabaré! Hace una vida que soy amigo.

¿Lo votabas? Nunca lo votaste.
Lo voté, sí, ahora lo voté… en todas estas elecciones.

Pero vos sos colorado.
Soy colorado, pero no estoy contento con los colorados. ¿Qué tiene que ver?

Cómo vas a estar contento si casi no existen.
No, pero cuando existían tampoco estaba contento. Y ahora hasta hace poco ¿te parece que han hecho las cosas bien? Son un desastre los que están integrando, muchacho.
¿Sabés por qué en este país la mayoría de las cosas van mal? Porque hay poca autocrítica. Hay que decir la verdad cuando pasan las cagadas. ¿A vos qué te parece el asunto este de ANCAP? ¡Fue un choreo! ¿Le vas a mentir a la gente?

¿Hubo choreo o mala administración?
¿Mala administración? ¡Cada invento, cada compra!… Y son boquetes que no los tapás así nomás. Tenemos que estar poniendo y pagando. ¡Date cuenta, loco! La nafta no vale nada y acá la pagamos un toco. Está regalada, a veinte y pico de pesos el galón, los cuatro litros y medio. ¡No lo vamos a arreglar nunca!

¿La izquierda mejoró el Carnaval?
A la izquierda le gusta el Carnaval, a la derecha no. El carnaval, lo mejoró todo Tabaré. ¡Todo!

Estás muy tabarecista, me parece.
No estoy muy tabarecista…

Vos estás siempre cerca del poder, me parece.
¡No, no, ni por gusto! Mirá, tenemos una ley: vos venís y ponés un aviso; y con la ley que tenemos nosotros te doy un recibo y bajás el cien por ciento del impuesto a la renta. ¿Qué te parece? En estos momentos en que se cayeron todas las publicidades, nosotros tenemos publicidad. ¿Por qué tenemos?
Porque favorece al que ponga. Y esa ley la puso Tabaré, ¿no cierto? ¡Sos loco! Tabaré ha hecho de todo por el Carnaval. Le ha dado un apoyo bárbaro. Las cosas como son, hay que decirlas. Acá ni blancos ni colorados nunca vinieron a traer un aviso. Vienen a comer, a saludar y todo, pero la verdad es la verdad. Y lo tengo que decir en todos lados. ¿No te parece? Hay que decir la verdad.

Tabaré es carnavalero, siempre le gustó.
Siempre le gustó, como loco.

Le da al tamboril. Y María Julia sigue saliendo.
Sale. Hay un montón de gente. Apoyan con muchas cosas. El de la Intendencia, por ejemplo. ¡Apoya como loco, el muchacho!

¿Decís que Daniel Martinez apoya?
Daniel apoya.

¿Tenés esperanza de que haga una buena Intendencia?
No. Esta Intendencia me parece que no la arregla nadie.

¿Por qué no la arregla nadie?
Y porque me parece que los cargos que han puesto están mal dados.

Vos te quejás con la de Cultura. ¿Del resto también?
¡Y qué te parece! Cada uno… Tienen de asesor a uno que tiene demandas por treinta millones de dólares. El que era el dueño de Roldós. Ese, cagó a todos los vitivinicultores. Se quedaron con la bodega de Calvinor. La mejor bodega de Uruguay, todos tanques de aluminio. Una locura. Y la cagó ese que tienen ahí en compras, en ventas, de asesor.

No me acuerdo quién es.
El dueño del Medio y Medio. Acá cualquier gil no sabe nada y agarra el cargo. Y ya te está robando, m´hijo. ¿Cómo voy a agarrar un cargo de una cosa que no sé? Ahí, el buen hombre que está es Nopitsch. Sabe y es honesto.

Pará, vos agarraste mucho cargo y no sé si sabías de todo. De diarios y revistas, ¿sabías también?
Yo fui jefe de ventas del Diario de la noche, doce años jefe de ventas del diario El Día. Trabajé en Hechos, en BP Color, en Mundo Color. Yo trabajé toda la vida en los diarios. ¿No voy a saber de diarios?

¿Y por qué nunca agarraste la presidencia de Danubio?
Mirá, este que fundió a Danubio está al lado del intendente.

Es el segundo.
¡Y lo fundió a Danubio! Porque lo agarró lleno de guita y con cada paquete de jugadores para vender… ¡Y lo fundió! Solo a Cavani, le debe cinco millones de dólares. Danubio debe treinta o cuarenta millones de dólares. En cualquier momento no juega más.

No salen las transferencias, es dificilísimo.
Salían las transferencias, antes. ¿Y ahora por qué no salen?… Porque están trabajando mal.

Compran menos jugadores en Europa.
Me parece que no tenemos tantos jugadores como para Europa. Yo vendí uno que ahora se va… el año que viene. Cuando lo vendí, tenía dieciséis años… y lo vendí en cinco millones de euros. Ahora cumplió dieciocho y se va.

¿Vos seguís trabajando como contratista de FIFA?
Sí.

¿Eso es lo que te da la fuente de ingreso?, porque el resto… del carnaval, no sacás un mango.
Y las revistas y los diarios no me dan ingresos.

Qué te van a dar si no vendemos nada. Si es un desastre. ¡Ni nos exhiben! Hay unos pocos que no exhiben.

Los quiosqueros están funcionando mal. Pa’ mí está funcionando mal el pueblo, que no lee más. No leen nada. Sabés los líos que tenemos con eso.

Se venden poquísimo los diarios.
¿Y te parece que es negocio para mí, que no se venda? Estamos locos que no vendemos. Pero yo, aparte, tengo otros negocios. Tengo un haras con mi hermano.

¿En la Gavroche estás vos también?
Sí.

Estás en los pingos. Tenés los huevos en varias canastas, como quien dice.
Sí, son canastas que no son seguras. Porque los pingos acá… ¡donde venga cualquier cosita!…

¿No venden caballos para otros países ustedes?
Cuando sacamos buenos, sí, pero los remates los hacemos acá. Últimamente vendimos setenta y cinco potrillos. Criamos mucho.

¿Dónde tienen haras?
En San Ramón y en Rincón de Pando.

¿Cuánto tienen que criar para vender setenta y cinco?
Nosotros tenemos trescientos y pico de yeguas madre, todas importadas: americanas, argentinas. Y diez o quince padrillos, que se van poniendo viejos y tenés que salir a comprar y tenés que embocar. Ahora estamos probando dos.

¿Quiénes se llevan los caballos? ¿Los árabes?
Los caballos Pura Sangre se compran de todos lados. El último que sacamos, que ganó el Ramírez hace dos o tres años, se lo vendimos al presidente de Chechenia.

¿A cuánto le vendés un caballo así?
Un millón y medio de dólares.

Da plata ser el presidente de Chechenia.
Le importa poco la plata a esa gente. Les gusta estar más en guerra y pelear, que otra cosa.

Se venden caballos no solo de carreras sino de enduro, también, ¿no?
¡Uh! Eso…vienen los árabes con un avión, mandan a un tipo a ver los que ganaron y se llevan setenta, ochenta, y los pagan cuarenta o cincuenta mil dólares. Caballos que se vendían a dos o tres mil dólares.

La tenés clarita.
Es una industria buena, que la tenemos que cuidar. Por ejemplo, ese señor Cha que está al frente de Casinos del Estado deja entrar caballos brasileros, cualquier cantidad, y está matando la industria de acá. Y en cualquier momento caga toda la ganadería, porque en Brasil hay grandes pestes.

¿Deja entrar caballos a competir?
Trae a competir, porque él está prendido del negocio de los caballos. Pero estamos pasando por un momento en que hay tres o cuatro pestes, y de allá vienen sin revisar ni nada. En cualquier momento tenemos el país lleno de muermo. La culpa de eso, si algún día pasa algo, la tiene el Ministro de Ganadería, porque él sabe lo que está pasando. ¡No va a decir que estaba durmiendo y no sabía! Está bien avisado por todos, por propietarios, por criadores, por todos está avisado.

¿Traen caballos brasileros para correr?
Para correr. Y en Brasil hay una gran peste. Y si vienen veinte, catorce vienen enfermos.

Y eso puede contagiar a los uruguayos.
Puede contagiar. El muermo es una enfermedad que sabés lo que es: se duermen parados los caballos.

¿Vos decís que Cha está autorizando a que vengan los caballos esos?
Sí, Cha está en el negocio.

¿Porque está vinculado con quién?
Con brasileros. Cha juega a dos cosas: está arreglado con la empresa, con los dueños del hipódromo y de todo. Es un bandido. Ya se lo dije en la cara.

No querés a nadie, te vas a pelear con todo el mundo
¡Y me peleo! Pero no me gustan las cosas así.

¡Sos duro, eh!
No soy duro, pero qué querés que haga, esto acá era una cueva de ladrones.

“Esto”, ¿es DAECPU?
Esto, sí. ¿Y qué? Siempre ganó lo mismo y nunca tuvo nada. ¿Por qué tiene todo esto? Porque acá la guita se ve. Tenemos panteón…tenemos lo que quieras: esta casa…una escuela enfrente. Nunca era nada de nosotros. El que se fue nos dejó esto con deudas de ochenta o noventa mil dólares. ¿Qué te parece? El señor Natale. ¿Y quién los pagó? Los pagué yo.

No, los pagó el carnaval.
Sí, pero porque yo pago, porque sé administrar.

¿Por qué los Espert tienen fama de pesados?
Porque a veces nos peleamos.

“A veces nos peleamos.” Ya relajaste como a cuatro.
Pero yo en la calle soy respetuoso, no me meto con nadie. Pero si me tengo que pelear con alguien, me peleo. Fui boxeador.

Eras peso pesado.
No, cuando me fui para Europa me fui pesando setenta y tres quilos. Después, volví pesado. ¡Pero muchacho! En este país hay mucha delincuencia, mucha gente que se te arrima para chorear. Yo acá tengo cada lío. Les digo: ¡Acá no, loco!… vayan a otro lado.

La inseguridad es brava en todos lados.
Pero los que vienen a un club, a una comisión, y se meten en un cargo, son más bien rastrillos. Porque el chorro está en la calle y vive de eso. Yo no voy a arreglar el mundo. ¡Pero no te podés rodear de tipos que están acá para llevarselá, loco! Marchan bien las cosas, pero mirá que vivo acá todo el día, descuidando cosas mías, porque cuando te das media vuelta…

Te desaparece algo.
¡Pero por favor!¡Es así! Le guste a quien le guste.

Entonces no serás tan pesado, si te das media vuelta y te vacunan. No te tienen miedo.
Los que te rastrillan, rastrillan a Mandinga. ¡Por favor! Y no voy a estar todos los días rompiéndole la cabeza uno.

Te has vuelto blando.
Llegan los años. Tengo setenta y uno, los cumplí el veintiuno de enero.

¿Y tu hermano es mayor?
No, el mayor soy yo. Nos llevamos dos años.

Ustedes eran de La Unión, ¿no?
Somos de La Unión. No vivo ahí, pero si saco a la murga la saco de La Unión.

El fundador de la dinastía era tu viejo: el Loco Pamento.
De los diarios, de las murgas. De todo.

Contame alguna anécdota de tu viejo que te acuerdes.
Era un loco bárbaro. ¡Si le hubiera hecho caso a mi viejo! Yo era bastante bravo de chico. El único que estaba pupilo en la Sagrada Familia era yo, para que te des cuenta.

Eras incontrolable.
Incontrolable. La verdad que sí. Pero mi viejo era bravo también. Salíamos a la calle y veníamos con un ojo hinchado… y te decía: “Andá y matalo, que yo te saco”. Hubiera matado a doscientos si le hubiera hecho caso a mi viejo.

¿Eras pupilo en la Sagrada Familia?
En la Sagrada Familia estudiaron un montón de políticos, del Frente un montón. El otro ministro de Economía, Lorenzo, iba a la Sagrada Familia. Era una barra ahí.

¿Cómo te llevabas con los curas vos?
¡Cada lío con los curas! y más, pupilo. Son bravos los curas de pupilaje. Te meten el peso. Había buen cuadro de fútbol, me acuerdo, pero todos jugaban a la pelota en mano. Los curas jugaban como locos. Ahora acá si tenés un hijo y le pegás, el hijo te sale mandando en cana. ¡Dónde se vio! Antes te daban cada boleo en el orto. La gente dice que antes estudiaban más. Estudiabas más porque tenías miedo, porque te daban cada una. Ahora no te hacen nada y eso es lo que pasa. El dilema que hay ahora, que
no estudian por esto o lo otro, que no hay aulas, que ahora a un botija no lo podés tocar. Antes el padre lo miraba así, le daba una patada en el orto, ¿y sabés cómo estudiaba? Ahora los tratan como señoritas. Cambió. ¡Mandan ellos! Si el padre le dice: “Te voy a pegar”, el hijo le dice: “Te mando en cana”.

¿Ese tipo de cosas se las atribuís al deterioro que ha sufrido el país?
¿Y a vos qué te parece? Antes cuando estudiábamos te miraban o te pegaban con una regla, ¿te ibas a hacer pegar dos o tres veces? Ibas y estudiabas. Ahora tenés cada lío, la madre le pega al profesor. ¿Dónde viste una madre, cuando yo era pibe, pegarle al profesor? Nunca. Esa es la única verdad que hay acá.

Se ha perdido una escala de valores.
Pero… ¡Y cómo no se va a perder! Pero… ¿Y vos no le tenías respeto a tu padre? No precisa ni que sea pesado ni nada. Si te da un cintazo una vez, ¿te vas a hacer dar otro? Ahora vienen los padres a pegarle al maestro. ¿Dónde se vio, loco? Hay que tener un poco de respeto, también. ¿Y los maestros por qué tienen que bancar tanto? Son los que menos ganan. Si nos ponemos a hablar de cosas no podemos estar alegres, porque las cosas no van bien. Todo era mejor antes que ahora, y más en este tema del respeto.

¿Cuándo se empezó a quebrar eso?
Ya hace unos cuantos años. El que lo terminó de quebrar fue Mujica. ¿Y qué te parece? Un gobierno mal hablado : “como te digo una cosa te digo la otra”. Yo, de esa política no soy hincha. Él sabe que yo no soy hincha de eso. Él la lleva muy bien así, pero no a todo el mundo le gusta.

Pero en el mundo…
No lo conocen bien como lo conocemos nosotros.
¡Yo qué sé, muchachos! Ustedes son zurdos natos y sabrán, pero también saben lo que está bien y lo que está mal, porque no son ningunos otarios.

Ahora, lo que no podés decir de Mujica es que no sea honesto. Tal vez. Pero mirá que las cosas que ha armado él: ¡en todas falta! Ha dejado cuentas de cosas. Tal vez él no toque nada, pero…

Yo no creo que él se quede con nada.
Yo no creo. Pero hay cosas pa’ solucionar de ese gobierno.
Y las roscas que se arman, después son difíciles de desarmar. Por favor… lo de Sendic…dice que no tiene nada que ver. ¿No sabía que pasaba eso? Le hablás y mira para otro lado como un perro que lo están cogiendo. Muchachos, hay cosas que…

¿Cómo cambiamos esto, según tu criterio?
Y hay que apretar. A Tabaré le dije: “Le estás mintiendo a la gente, Tabaré, dijiste que ibas a apretar. Todos los días hay choreos, está lleno de cosas, mandá cuatro o cinco pa’dentro a ver si la gente cambia un poco y dice que “se terminó la joda”. ¿Eh? Yo sigo bien de al lado a la Argentina porque: ¡más quibebe que en la Argentina, imposible! Agarraron a esta vieja Sala, ahora, que es cualquier cosa. La metieron por error, pero ahora le están escarbando y está apareciendo de todo. Alguno tiene que endurecer la mano. Acá en el Frente dentro de cuatro años, uno ya está viejo y yo no sé si llego ni nada, pero, ¿quién va a ser el presidente futuro? ¿A quién ves en el Frente con una mano dura que venga y haga limpieza y no se case con nadie?

Tabaré había hecho discursos de eso.
Lo veo un poco quedado.

Ya cuando fue intendente fue duro, y como presidente…
Fue duro hasta ahí nomás. A los sindicatos les otorgó todas las cosas. Compró la paz, pero mirá ahora. Ahora no manda el intendente en la Intendencia.

A Martínez se le complica.
Cómo no se le va a complicar si no tiene un sope. ¿Qué hace la Intendencia si te entran cien pesos y te quedan quince para hacer obras? ¿Qué obra vas a hacer? No puede arreglar los camiones para levantar la basura, hay que ir a llamar a los milicos. Pero no a Martínez: ¡le va a pasar al que venga! ¿Qué te creés, si le sale el préstamo ese? Ese préstamo se lo comen. ¡Desaparece!

Si venía de otro partido igual lo iba a voltear ADEOM.
¡Andá a saber! En la guerra, ADEOM no va a perder la posición que tiene y para el Estado esa posición es dañina. En una ciudad tan pequeña no tiene la Intendencia tantos trabajadores como te exigen.

Para vos, las cosas no se administran bien.
¿Puede haber una Intendencia que tenga todos los camiones rotos? ¿Que no haya diez camiones en el taller arreglandosé para la semana que viene? A los camiones contratados de la Intendencia hace dos meses le daban ciento ochenta horas de trabajo por mes. Hace dos meses llamaron a los camioneros y les dijeron que cambien de camión, que les iban a dar más horas. Ahora, les hicieron invertir en camiones de doble cabina y le dan la mitad de horas ¡Mirá qué lío! Le van a hacer un pleito como de cien mil dólares por cada camión. Yo te digo porque tengo camiones ahí.

Van a tener problemas con los fleteros también ahora.
Con los fleteros y con muchas cosas más. Yo hablo de los fleteros porque estoy al lado y conozco el tema y estoy hablando con Nopitsch. ¡Es una barbaridad esto!

Al Uruguay, ¿lo ves complicado?
¿Y vos lo ves fácil?

Yo soy optimista.
Sí, pero, ¿quién es el tipo que va agarrar la manija?

No es cuestión de un tipo, sino de un montón de gente.
Pero la cabeza tiene que apretar un poco para que los demás entren a ver que esto no es joda ¡Escuchame!

Sin embargo, en América Latina, Uruguay es el país que tiene menos corrupción.
¡Somos menos! (risas). ¿Cuántos somos? Cuatro gatos locos. Bueno sería sin con ocho gatos locos estuviéramos al frente de la corrupción de Argentina, ¿sabés los millones que hay ahí? Acá somos buenos pa’l fútbol y nada más. Acá somos un barrio de la Argentina y sacamos jugadores como locos, hay jugadores por todo el mundo. Le ganamos a la Argentina, le ganamos a Brasil, y después pará de contar. ¿A vos te gusta cómo está la seguridad en este país? ¡¿Y el hombre sigue?! ¡Sí!

¿Bonomi?
Bonomi… ¡Qué te parece! ¿Y hace pocos años que está?… A veces hay que cambiar cuando las cosas no cambian.

¿Depende solo del Ministerio?
Y a los milicos quién los manda.

A vos te parece que falta mano dura.
Me parece que falta mano dura. Antes, en la calle, los ratis andaban levantando pungas. Te veían dos o tres veces y te preguntaban: “¿Qué hacés vos, dónde trabajás?” “No trabajo.” Y te mandaban cinco días. Después no andabas más en la calle. Y si no, te volvías a comer cinco días. Ahora han destruido las jefaturas. En las jefaturas creo que lo que queda es la brigada de asalto, y no agarran a nadie. Pero antes, había brigadas para los pungas, para esto, para todo, había orden público, para los cabarets, pa’l juego. ¡Desapareció todo! Había una brigada que andaba solo en los hoteles. Extranjería dando vuelta a ver quién hay y por qué están. Todo. No hay más. Quisieron arreglar las cosas, cambiar, sacar. Antes, los botones, ¿sabés cómo te sacaban? Sabían si andabas haciendo algo o si no andabas. Conocían la calle. Ahora no conocen a nadie. ¿No ves como entran a chorear hasta sin máscara? Cualquier barbaridad. Y sigue siempre el mismo. Yo qué sé, tendrían que probar con otro. Si no, que lo traigan de vuelta después.

También hay mucha corrupción en la Policía.
Ganaban muy poco. Ahora parece que están igual que los maestros. Los maestros estuvieron diez o doce años que…¡hay que ser maestro con lo que ganaba esa pobre gente! ¿Eh?

Han mejorado sustancialmente.
Pero tienen que mejorar más. Ahora tenés el narcotráfico que tiene mucha plata ¡Te arregla cualquiera! Si el tipo no gana bien… ¿Para dónde agarra? Aparte, están contaminados. Porque un milico vive en el mismo lugar en donde viven los chorros, viven en un cantegril ¡Conviven! Ahora, primero te tiran y te lastiman y después te revisan a ver si tenés algo. Antes, ¿iban a entrar a los tiros a un boliche a matar a una mujer que está vendiendo o algo? ¡Nunca! ¡Escuchame! ¡Qué se iba a hacer eso! Conocí chorros de acá, cualquier cantidad. Otro respeto, otra cosa.

En eso influye mucho el narcotráfico.
Los de la droga andan con mucha guita, arreglan a cualquiera.

Dominan barrios.
¿Barrios? Comisarios. Comisarías enteras. ¿O te creés que no saben dónde están las bocas y dónde está todo? Tendrían que caer diez o veinte bocas por día. Y también tenés que mirar cuando la cazan, a ver si la queman o la guardan y después la trafican. Hay que mirar eso, también. Yo, el tiempo en que me acuerdo que la quemaban es cuando estaba Magurno en la Española. Después no vi más quemar, no vi quemar un quilo más de falopa. ¡No los vi quemar un pucho! (risas)… ¡Se la toman!

Marihuana en las farmacias. ¿Qué pensás del tema?
Que le van a dar cada cañazo a las farmacias por la marihuana. La farmacia es para vender cosas para la salud. La marihuana es mala para la salud. Yo nunca fumé ni voy a fumar.

¿Y ninguna otra droga?
Sí, cocaína. Tomé y estuve enviciado y salí por las mías, sin ir a ningún lado. A pura voluntad. Un día dije: “No va más”, y no va más. Y paré.

Ahora, al escabio le das.
No, ahora no. Tomo un whisky, cortado. Ya estoy grande.

¿Las hiciste todas?… las que tenías que haber hecho
Sí, hice mucho.

¿Estuviste en cana?
¿No voy a estar? En todos lados, porque anduve en cana por el mundo, también.

¿Qué macana te mandaste?
Nada, problemas con las minas, con las cosas. Pero nunca anduve robando ni nada de eso.

Lo tuyo era solamente mujeres. Por eso tenés conocimiento de los chorros, también, porque conviviste con…
Siempre me crié en barrio, y chorros había en todos los barrios. ¡A ver si un chorro que vivía en el barrio iba a dejar que te robaran la casa!

Y el mundo del narcotráfico que conocías…
No, pero nunca tuve trato.

Pero si consumías, algún vínculo tendrías.
¿Y cómo no voy a tener? ¿A quién se lo voy a comprar, si no?

Por eso. ¿En qué ha cambiado?
No lo sé. En la droga… vende falopa el milico, vende falopa el delincuente. Al que le viene primero, agarra.
¿Entendés? La droga tanto la vende un milico, tres milicos se juntaron y le llevaron cinco quilos a uno y salen y la venden ellos. ¡Y todo así! Y otro día, otro. ¡La droga es la mierda más grande que hay, loco!

Ahora, ¿cómo la combatís?
Dando guasca.

No ha funcionado, en Estados Unidos viven dando guasca y siguen consumiendo más que nunca.
Y bueno. Por ahí le está ganando un delito a la prevención.

El tema de la legalización de la marihuana apunta a probar otra cosa, a ver si funcionaba.
¡No ves que siguen agarrando! En la Argentina no agarran nunca, pero cuando agarran, son camiones enteros. No agarran porque hay arreglo, pero cuando se zafa alguno del arreglo, le caen. Me parece que hay que apretar más las bocas y todo eso.

Pero a las bocas las apretás y te abren al lado.
¡No es tan fácil! Y lo peor que la boca vende la pasta base, que es lo que mata a la juventud. ¿Nunca hablaste con ningún médico sobre los efectos de la marihuana en la juventud? Un pibe, empieza con la marihuana y al año tiene cáncer en los testículos. ¡Y acá dicen que es bueno! Cuando quieren implantar algo te dicen que es una cosa bárbara.

Pero ahora está todo el mundo comprando igual, ¿vos vas a los tablados y no sentís el olor a porro?
¡Cómo no voy a sentir, el otro día estábamos comentando eso! ¡Un olor a porro bárbaro! ¡Sí, sí, sí!

Prohibila en el Teatro de Verano, a ver, jugatelá. ¿Los murgueros no fuman?
El murguero es más bien curda, toman como locos. Yo subía treinta o cuarenta litros de vino cortado al camión de la murga todas las noches.

Cantaban mejor.
¡Cómo no iban a cantar! Y hacíamos dieciocho o quince tablados. Ahora hacen quince tablados y no salen por quince días. Todo cambió. Los letristas. Antes el letrista le escribía a cinco o seis conjuntos, ahora se juntan cinco o seis para escribirle a una murga. Es bravo de arreglar esto, a lo que conocimos nosotros. A volver a lo que conocimos nosotros…que quisiera volver mañana mismo. A que la gente piense como pensaba antes.

¿De dónde surge el apodo Cachete?
De cuando boxeaba, que era de los más gorditos, de los más cachetudos. Me quedó Cachete.

¿Ganaste alguna pelea o eras medio malo?
De acá me fui invicto. Fui campeón de los barrios y me hice profesional, ganaba y perdía. Pero también me entrenaba más en el cabaret que en otra cosa.

¿Dónde estuviste en Europa?
En Alemania, en Italia. En Italia estuve diez años.

Con el fútbol no te metiste.
Cómo no, ¿no soy contratista? He hecho de todo. Me entretengo, paso bien, vivo bien. Tengo muchos amigos. Y el carnaval es lindo, es linda gente la del carnaval.

Antes había un tablado en cada esquina.
Las murgas cobraban dos pesos, ahora cobran quince o dieciséis palos. Andá a todas las esquinas a llevar ahora conjuntos de dieciséis palos. ¿Sabés cómo te lo ponés de sombrero el negocio? Yo tuve doce años el tablado en Dante. Se iban unos y venían otros. Tenía cuatro mil butacas y no sabía adónde mandarla a la gente. Tenía la misma gente que el Teatro de Verano.

Pero con este sistema hay menos escenarios y va mucha menos gente.
No, no, la gente va bien. Ahora vas a un lado y hay tres mil personas, vas a otro y hay dos.

A vos te gustaban más los carnavales de antes.
¡Cómo no me van a gustar, si me crié en eso! Eran lindos los carnavales de antes. Los desfiles de antes. ¿Conociste el corso de la Unión? Un alto así de papelitos en la calle. ¡¿Sabés lo que era?! Las veredas, las casas adornadas para el concurso. Los cabezudos, los carros. ¡En La Unión hacían cada carro, cada cosa! A mí de carnaval preguntame lo que quieras que conozco todo.

Se ha alejado el pueblo, de algún modo.
Y qué te parece, vino una señora a la Intendencia y ahora quiere que la reina del carnaval sea un puto. ¿Qué te parece? Más cambio que ese.

No te la agarrés con la directora de Cultura.
La directora de Cultura está loca. Ya la relajaron los del teatro. Vino el flaco Denevi y le dijeron de todo. Le hicieron un coso en la Intendencia y se tuvo que ir. ¿Te parece un cambio fulero ese? No va a dejar de haber carros, y primeramente hay cosas que defen-
díamos los artesanos, y artesanos ya no hay más. Para los carros, para los cabezudos, para todo eso. Creo que algún carrito chico lo están haciendo en la cárcel, en el CNR.

Se ha comercializado todo, porque hay pases entre murgas que se pagan hasta diez mil dólares.
Y pagan cualquier cosa.

Como la murga esta que sacaron Recoba y Pacheco.
Esa la sacaron bien.

Sí, pero, ¿cuánta guita metieron ahí?
Hay otros que traen y gastan en componentes y la sacan mal, porque no saben sacar, ponen la plata y la sacan horrible, y marchan. Estos sacaron bien. ¿Entendés? El que no sabe, si la pone, la pierde.

¿Cómo fue el quincho que tuviste con Tenfield?
No tuve ningún quincho.

Cómo que no tuviste ningún quincho, si estabas negociando con Tenfield y terminaste llevando a canal 5.
¿Dónde negociando con Tenfield? Tenfield tenía un contrato con DAECPU, un contrato leonino. Nos daban setenta mil dólares por carnaval, y el contrato duraba cinco años. Y, por ejemplo, nosotros cuando terminaba el contrato podíamos llamar a licitación… pero ellos podían empatar, entonces estaban siempre ellos. Agarré y dije: “Se terminó”. Alquilé cámaras, alquilé cosas, alquilé un espacio de televisión y fui y lo hice yo. Después, quedé libre.
Y llamé a licitación y se presentaron. La primera vez, cuando dejaron, me daban cuarenta y dos mil; ahora, me dan quinientos cuarenta mil dólares por el mes de carnaval.

En definitiva, era un problema de plata, lo que vos querías era más plata. Ganaste la cuereada.
¿Y por qué vamos a regalar esto? La televisión, que pague los derechos.

Te metiste con pesos pesados, también.
¿Y qué me hicieron? Todavía no me mandaron a hacer nada… y no me van a mandar (risas). ¿De qué te reís? si sabés que tienen comido a todo el mundo. A los canales fui y les llevé el carnaval, le llevé a Romay: “Si usted me paga a mí, hacemos contrato” Se corrió la bola y a los dos días le dijeron: “Mirá que si te arreglás con el Cachete no te damos más los goles”. Se cagó.

Esto es un país de extorsión y de corporaciones que meten presión.
Yo no extorsioné a nadie. Yo defendí la mía.

Sos el único que le ganaste a Paco.
¡Y sí!

No hay otro que le cuente ganadas al Paco.
Y no, le ha dado a todo el mundo. Son bravos.

Y lo podés contar, todavía. Sos un fenómeno.
Cómo no lo voy a contar, qué me van a hacer. Yo conozco la calle, por los lugares en que estoy… ¡Qué te parece! Yo, cuando sacaba la murga, a la pregunta esa de: ¿qué es una murga mamá? Respondía: “una murga es dieciocho con antecedentes”. Tenían todos antecedentes, ¿quién no tenía? (risas) Ahora el carnaval es una papa, son todos nenitos de su casa.

Sí, son todos buenos.
Encontrás alguno que se haya hecho alguna cura por drogas, alguno que haya estado por tomar, pero después, delincuentes no hay. Antes estaba lleno de pungas, de chorros, salía de todo en la murga.

El fenómeno de la murga joven es interesante. Siguen saliendo murguistas de todos lados.
Y con la escuela ahora, los que van a salir.

¿Tenés escuela de murguistas acá?
Ahora la abro, enfrente, para chicos, grandes, el que quiera. Todo de carnaval, profesores de percusión de murga, de un montón de cosas.

Que los conjuntos actúen todo el año, ¿le hace bien al carnaval?
¡Cómo no le va a hacer bien! Es un trabajo. Lo único que le hace mal al carnaval es que no tenemos trenes. Llevar el carnaval a todo el interior sale muy caro. Vos ponés una carga de trigo y sale más caro el viaje que lo que lleva arriba. Mujica quedó en poner trenes, estamos esperando, ahora los pondrá el mes que viene (risas). ¿Te acordás que inauguró un tren con la presidenta? Duró un día. No hay que reírse de la gente.

¿Cómo laburan ustedes con los carnavaleros del interior?
Y vamos. Acá vinieron a comprar pa’ Maldonado, llevan pa’ Maldonado. Traemos valores, hay muchos valores saliendo del interior. ¡Cuántos buenos traje del interior!

Han competido, el año pasado había una murga de Maldonado. Sí, vienen a competir. Pero no pueden, se les hacen caros los viajes, las cosas. Acá los viajes son carísimos, muchacho. Hasta que no haya trenes… Metés cinco comparsas arriba de un tren, te vas a Artigas de mañana y volvés a última hora.

Artigas tiene carnaval.
Todos tienen su carnaval.

Melo, Cerro Largo.
Sí, ¿pero sabés a cuánto está del carnaval de nosotros? Pasa que ahí, en ciertos lados, está lleno de bufarrones y lleno de putos… por eso, porque hay bufarrones (risas).

Como era el lío que había siempre entre La Teja y La Unión, que hasta balazos había.
No, eso lo hacía mi amigo. Daba manija el Dalton.
¿Pero sabés lo que hacía? Llenaba los tablados. Era un tipo bárbaro. Un bocho. Hizo la mutual de fútbol, hizo todo. Las domas, los payadores, todo. Se fue el Dalton, murieron un montón de cosas.

El Jardín de la Mutual.
El tablado ahora no lo dejan hacer por ruidos molestos. No dejan ensayar. Una vergüenza. ¿En Brasil no hay edificios? ¡Y hay carnaval en todos lados, loco! En el mes de carnaval no existen los ruidos molestos, hay que poner un horario y tantos decibeles y dale pa’arriba en todos lados. Ya no está quedando ni club para ensayar, porque los vecinos se quejan y no dejan.

¿Rondamomo está funcionando bien?
Sí, ¡cómo no va a funcionar? Salgado y yo lo hicimos.

Se metió Dourado también ahora.
¡Ah, eso es publicidad! Dourado se metió, y se metió Macro Mercado, por primer año. Y estoy por agarrar uno entero de Sodimac.

¿Qué pensás de UBER?
Nunca me metí por dentro ni lo entiendo cómo es, pero sé que están medio bien bancados los tipos, que no tienen casi nada contra ellos. No se les puede hacer casi nada, ¿no?

¿Taxi nunca tuviste?
No Taxi no. ¿Para qué querría taxi yo? Acá hubo muchos años que se ganaba mucha plata con los diarios. El Diario de la noche vendía doscientos sesenta y cinco mil, tiraje certificado.

Y hoy no se vende un pomo.
Entre todos no se vende la mitad. Ni todos los diarios de todo el país juntos.

¿Y las revistas argentinas?
Cayeron todas. ¡Sabés como cayó! Las llevás y las traés todas para devolución.

Los quiosqueros no exhiben bien los diarios y tampoco hay más diarieros.
¡Y qué van a salir con el diario abajo del brazo! A las tres de la mañana, mandan a uno a buscar el diario, después caen ellos a las diez. Todo mal. Yo creo que hay que sacar un diario a la una de la tarde y nosotros mismos los distribuidores llevarlo a cada quiosco.

¿No hablaste con Fasano?
Fasano te caga. Porque Fasano te pide para sacar murga y no te paga más. Te pide los derechos de autor y no te paga. No le paga a nadie, Fasano ha cagado a todo el mundo. No es honesto. ¿A ese hombre Yoca te parece que no lo cagaron? ¿Al que le vendieron el diario? Y el que lo cagó a Yoca, el que lo metió en el negocio, fue el embajador de Argentina, Pomi. ¿Viste como en todos lados se prenden y te dan?

No se venden diarios porque son muy caros, por la distribución.
Porque la gente lee menos.

Se llevan ustedes un margen bárbaro, también, no jodas.
Y si no, no lo podés hacer. El País salió a las cuatro de la mañana y a las ocho de la mañana tiene toda la plata arriba de la caja. ¿A ver cómo hacés? Dale a los diarieros crédito a ver quién viene a pagarte. Nosotros le damos a los diarieros con plata o sin plata. A ver…haceme un sistema y después traelo. Por favor…

¿No hay que bajar el precio?
¿El precio te lo voy a bajar? ¡El papel vale un platal! Vamo’ a hablar de El País. ¿Vos te creés que El País tiene que tener toda la gente que tiene? Aparte sacaron gente buena, sueldos caros. Sacaron uno y pusieron cinco malos. Perdió calidad. Mirá que un diario que se venda, en este país lo hacés con quince personas, con las máquinas que hay. De acá va derecho a la máquina, antes había que hacer plomos, esto y lo otro. ¡Es una papa! Pero no es papa porque la gente no compra. Con lo que vale un diario se compra una milanesa al pan.

Por eso te hablo de los precios.
Los precios sí, pero tampoco tienen mucho interés en leer. Hay noticias a toda hora, en todos lados. A uno porque le gusta leer.

¿Vos sos de leer diarios?
¡Qué no voy a leer! Leo todo.

No sé, capaz estás en internet leyendo los diarios, ahora.
¡Qué voy a leer en internet si yo no sé ni cómo se maneja internet! ¡Dejame quieto! No me hagás lío que no sé ni cómo se maneja. Tengo computadora pero me la maneja una secretaria.

¿No tenés mail, Cachete?
Mail tengo, sí, pero me lo abre la secretaria.

No seas malo, hasta Mujica maneja una computadora. Mujica es un fenómeno (risas).

¿Qué diarios leés?
Todos los diarios leo. Los semanarios, todo. ¡Y han desaparecido plumas, eh! Antes había tipos que se podían leer y quedabas… Ahora no hay ni cronistas policiales. ¡Antes había cada cronista policial!

¿Sos de mirar televisión vos?
Sí. Miro cosas políticas y eso, nada más. En deporte miro boxeo y algún partido de fútbol. Me gustan mucho los programas políticos argentinos.

¿Por qué no te dedicaste nunca a la política?
Para dedicarte a la política tenés que ser un mentiroso. Los políticos son todos mentirosos.

¿No se te va a enojar Tabaré?
No. Yo no voy a decir que miente, no. Pero mienten… A la gente. Estás trabajando, vas, ofrecés una cosa y después no le dan nada y quedás como un mentiroso. Quedás en el medio. Porque vos salís a trabajar, vas por los barrios: “ofrecele esto, ofrecele lo otro”. Y después: ¿quién es el mentiroso? ¡Uno! El que le dijo: “Te voy a dar esto”, al tipo que está esperando una frazada, al que está esperando un terreno, una chapa pa’l techo, un trabajo.

¿Y un fenómeno como Novick?
¿Fenómeno hasta cuándo? Yo lo conozco, tengo amistad. Pero, ¿por qué fenómeno? Lo veo con mucha edad. Como empresario no digo nada. Estamos hablando de otra cosa.

Vos entraste hablando de la importancia de ser un buen administrador, y él se presenta como un buen administrador, como que sus empresas han sido exitosas.
La gente tiene que creer en él. Se precisan votos para poder administrar algo. ¿Los tendrá? Faltan cuatro o cinco años.

En Montevideo no le fue mal.
Sí, pero no tiene nada. Y así podés ir a las elecciones y no ganar nada, y estar en un apronte. ¿O no has visto a políticos que están siempre en apronte?

Mirá Batlle como aprontó y aprontó y al final llegó.
No vas a comparar a este hombre con Batlle. Me parece que Batlle es un bocho. Estudiaron para ser políticos. Sanguinetti estudió para ser político. Aparte de políticos me parece que tienen buenas condiciones. Estuvo por el mundo ganando plata, hablando y di- sertando. ¿Te creés que es para cualquiera?

El Pepe también va por todo el mundo hablando…
¡Pero no cualquier cosa, déjense de joder! ¡Me están tomando el pelo! (risas) ¡Pero habla! Es el más popular de los presidentes que tuvimos nunca. Y qué te parece. ¿No viste cómo anda vestido? Y es el más popular.

¿Qué opinás del tema Figueredo?
Está hasta la manija. Pero hay muchos que ahora le caen a Figueredo y están donde están porque empezaron con él. Se olvidaron del problema de ellos. Pero de la gente no hay que olvidarse cuando te han dado una mano. Ahora está en desgracia el hombre. Y no solo que están porque él los puso: muchos han hecho negocios con él. ¿O te creés que si acá entrás a revolver no caen más? ¿Que cae Figueredo solo?

Ahora, a vos te parece que no van a revolver.
Y, como todo, me parece que queda todo en la nada. ¿O vos ves algo? Pero si lo hubieran extraditado para Estados Unidos el FBI allá lo aprieta de otra manera. No sé los choreos del hombre de qué fecha son. El hombre hace tiempo que tiene una mujer que tiene mucha plata. Tiene pozos de petróleo en el Ecuador, es ecuatoriana.

¿Hay mucha joda en el fútbol uruguayo?
Joda hay en donde hay mucha plata. No hay un peso acá. ¿Empezará el campeonato acá? Si no hay plata, el fútbol de acá va a terminar semiprofesional.

¿Por qué no funciona el fútbol en el Uruguay? ¿Hay demasiados clubes?
¡Tas loco! tienen que juntarse de a tres y hacer uno.
¿Por qué Danubio saca jugadores? Porque en todo a la redonda no tiene ningún club y tiene un espacio bárbaro de conventillos y de cantegriles para sacar. Después vas a cualquier otro barrio y está lleno de clubes. Vas al Cerro y está Rampla, está este, está el otro. Quieren hacer treinta clubes, el Paco, porque quiere votos. Pero tiene que haber la mitad de clubes.

¡Qué quilombo vas a armar con esta nota!
No, no me armen lío.

Nosotros transcribimos lo que vos ponés y tenés un montón de cosas para decir.
Mentiras no son.

Publicada en VOCES Nro. 504, el 11 de febrero de 2016

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