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Humano, demasiado humano por Pablo Galante

Humano, demasiado humano por Pablo Galante
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FRANCISCO “PACO” ESPÍNOLA. (1901-1973)

Como si se tratara de un embajador literario, la figura ya legendaria de Don Paco, su genio literario, su don para la expresión pública, la docencia bien entendida, no como barrera erudita y torremarfilista sino como instrumento para la apertura mental y libertad de espíritu ofrecida a todos aquellos que quisieran escucharle, atraviesa gran parte del siglo XX, es un puente interno entre la generación anterior a la de él, a la suya (la del Centenario) y a las próximas.Algunos lo consideran el último escritor uruguayo. Pero ese mismo término, supongo, a don Paco, le hubiera resultado pomposo, ridículo. Lo que si es cierto, es que fue un maestro de la narración escrita y oral, un ser cordial y profundamente cristiano,provenía de una familia de raigambre blanca, algunos de sus antepasados habían sido oribistas, y tuvo el don de morirse un día antes que comenzara la última dictadura uruguaya. Es que el odiaba las dictaduras, ya había luchado contra la dictadura de Gabriel Terra, de manera infructuosa, con un rifle averiado, había caido prisionero en esa frustrada revolución dirigida por Basilio Muñoz y que había reunido,colorados, blancos e izquierdistas. Aunque había comenzado a estudiar Música, tal vez la cercanía con un maestro como el narrador nacionalista Javier De Viana, (1868-1926), al que solía ir a visitar todos los domingos a su última morada haría que publicara a los 23 años,dos cuentos:Visita de Duelo y El hombre Pálido en 1924. En 1926, año de la muerte de Javier De Viana , publicaría su primera colección de narraciones Raza Ciega, libro que tendría unánime y victoriosa acogida dentro del mundo intelectual de ese momento. Eran las épocas de los cafés con tertulia incluída, cuando diarios, semanarios y revistas, pululaban por doquier, Marcha, Asir, Alfar, Número, eran bienvenidas a la discusión y el debate , además de presentar y presagiar a grandes narradores y poetas. Paco escribió poemas pero con escaso éxito. Su novela monumental , Don Juan El Zorro, la comienza a pergeñar a fines de la década del veinte , pero la edición de la misma se produce recién con el advenimiento de la democracia en 1985. Paco la llamaba “Gran Poema”.Parece ser su trabajo más ambicioso, junto a su anterior y primera novela Sombras Sobre La Tierra, autobiográfica y que transcurre en las afueras de la capital de San José , ciudad que lo vio nacer el 4 de octubre de 1901. Fue esa primera novela, un gran éxito de ventas y crítica. Fueron varias las ediciones que el propio Espínola corrigió rigurosamente, resultando cada una de las ediciones, un libro nuevo. También editó en 1930 su único libro para público infantil, Saltoncito, aunque su alcance es tan universal como el de El Principito editado trece años después. El rapto y otros cuentos, la obra teatral La Fuga En El Espejo, el ensayo Milón o el ser del Circo y hasta el guión de cine Carlitos en Jerusalem editado recién en 2004, y el cuento Las Ratas, conforman el resto de su obra publicada hasta el momento.
En el prólogo a la reedición ampliada de Raza Ciega en 1967, Raza Ciega y Otros Cuentos, la poeta y ensayista Esther De Cáceres (1903-1971) nos señala: “Dos elementos fundamentales inspiran La Moral Del Escritor en Paco Espínola . El primero es esta atención al dolor humano, a la necesidad de amor y de pan, a la trascendencia del ser” Según el propio Espínola en 1957: “…Yo pensaba cada vez con más seguridad , atendiendo a la observación de otros fenómenos contemporáneos, que tal vez esta crisis actual de la sociedad, este mundo tan frío, tan hostil para el espíritu, tan cruel, tan duro, nos hace sumergir en un egoísmo que, en vez de obrar en beneficio nuestro, nos marchita lo poco de cándido que nos queda.Yo pensé que esta crisis, repito, pudiera muy bien ya estar tocando fondo, y que en un lugar y en otro, con más magnitud en un sitio que en otro, y de distintas maneras, se comienza a señalar en el horizonte del mundo que el hombre no puede seguir así. Que el alma humana comienza a exigir respeto a sus prerrogativas. Que se está haciendo necesario volver a una vida en que las relaciones humanas son más generosas, más tiernas y más puras, lo que permite que el corazón cumpla con su destino, que es el de ser solidario y el de querer, oscuramente, sin medir el grado de merecimiento de aquel a quien se ofrece”. “Hay que hacer por los hombres algo más que amarlos “ decía en Sombras sobre La Tierra (1935). La aparición de nuevos cuentos inéditos y desconocidos de Francisco “Paco” Espínola , es el acontecimiento literario de este 2022 y reafirma la vigencia de este gran escritor.El único representante de la “Generación del 45”que apuntó sus dardos contra la casi completa positiva unanimidad fue el destacado narrador Carlos Martinez Moreno, en la década de los sesenta y aún más allá en 1984, destronó a la inconclusa Don Juan El Zorro. Alberto Zum Felde, destacado intelectual uruguayo (1889-1976)en el tercer tomo de Proceso Intelectual del Uruguay,afirma: “Espínola plantea , como Florencio Sánchez, el importante problema del intelectual, dotado de una profunda sensibilidad y sentimiento de caridad cristiana, en su sentido más alto, el espiritual, el de la caridad por las almas y que intelectualmente, sin embargo, se hallan fuera de la fe cristiana(que es su única justificación metafísica)procesando doctrinas filosóficas o sociales racionalistas, de un idealismo humanitario”_________________________________________

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