Circula a todo vapor dentro del Frente Amplio la opinión, mezcla con reproche, de que el gobierno es una agencia de publicidad que ha conseguido instalar un relato favorable a su gestión, sobre todo a la gestión del Presidente Lacalle Pou. Con no menos convicción algunos integrantes del gobierno –más recientemente el Ministro del Interior- han descargado montañas de estadísticas y datos; afirman categóricos que “dato mata relato”.
Voy a desarrollar algunas consideraciones sobre esa afirmación tan rotunda –dato mata relato- poniéndolo en duda. Totalmente en duda. Creo que tienen razón los que dicen que en la sociedad del espectáculo (que es el lugar que habitamos) la ilusión siempre es más fuerte que una explicación de la realidad.
Trataré de demostrarlo con ejemplos, pero si utilizo ejemplos de acá, de nuestra realidad uruguaya, por la misma razón que expuse arriba unos me van a creer y otros van a rechazar mis ejemplos. Para evitar dicha descalificación de arranque voy a referirme a la situación de la Argentina.
La semana pasada comenzó el alegato público de acusación en la causa contra Cristina Kirchner por la obra pública de la Provincia de Santa Cruz, territorio donde tuvo origen esa dinastía de varios gobiernos sucesivos en la Argentina. El fiscal Diego Luciani tiene previstos ocho días para poder completar la prueba de las estafas perpetradas por los Kirchner: Ernesto, como gobernador de la Provincia y Cristina como sucesora en el gobierno nacional, cómplice y Lázaro Baez como mano ejecutora.
Sería muy largo y aburrido transcribir aquí la cantidad de datos contenidos en el alegato del fiscal Luciani. El resumen es así: Lázaro Baez se presentaba a todos los llamados a licitación para obra pública en la Provincia de Santa Cruz con una empresa que había creado pocos días después de que Kirchner saliera electo gobernador. Ofrecía siempre los precios más bajos y, en consecuencia, las ganaba todas. Luego de ganadas solicitaba un refuerzo de precio por x razones, a veces duplicando el original ofrecido, que siempre le era concedido. Después pedía ampliación del plazo para finalización y entrega de la obra (generalmente puentes y carreteras). Finalmente pedía, y obtenía, adelantamiento de todo el pago antes de la fecha de entrega, que nunca cumplía. Muchas de esas obras quedaron sin terminar y algunas nunca siquiera se empezaron. La televisión argentina ha mostrado estos días varios carteles en diferentes lugares de la provincia de Santa Cruz que dicen: Ruta tal, obra del gobierno Kirchner, empresa constructora L. Baez: y solo hay una huella en el descampado.
Estos son datos. Le va a llevar varios días de sesión al Fiscal Luciani para completar la lista. Digo, de paso, que otro fiscal anterior, el Fiscal Nisman, no pudo completar su tarea, como es notorio. Pero los dato nada pueden contra el relato.
Al concluir el primer día de alegato del Fiscal, habiendo mostrado todo lo que indiqué arriba y prometiendo mucho más, Kiciloff salió a los medios a denunciar la campaña de enchastre que están llevando a cabo los enemigos de Cristina. Y también se pronunciaron en ese sentido y con los mismos adjetivos el Jefe de Gabinete de la Provincia de Buenos Aires y el Sr. Larroque Ministro de Desarrollo del Gobierno Federal. No menciono a La Cámpora, por motivos obvios, ni a la totalidad de las bancada kirchneristas de ambas cámaras.
Está todo probado y documentado, están los datos, pero el relato tiene otros apoyos y, sobretodo, satisface otras necesidades. El kirchnerismo ha sido una rosca: tiraban las bolsas de dólares por encima de la tapia del convento, se quedaron con millones y millones de dinero del gobierno (que es, por supuesto, dinero del pueblo argentino). Pero Cristina dice: a mí me juzgó la historia y una considerable cantidad de argentinos que la votaron la van a volver a votar. El relato peronista que lo muestra como identificado con el pueblo y único representante auténtico sigue lozano a pesar de todo.
00000—–00000
El kirchnerismo está importando ahora un relato desde Brasil. Allí Lula fue acusado de corrupción y lo metieron preso. Pero salió, está en libertad y va a ganar las próximas elecciones y volver a ser el Presidente. Es un relato de final feliz conveniente para ser importado por el kirchnerismo en estos momentos de ataques y dificultades. Ese es un relato. En los hechos Lula nunca fue declarado inocente: quedó en libertad después de 580 días de cana. Fue liberado por una argucia técnica: el tribunal que lo condenó, el de Curitiba, no correspondía, debía haber sido en Río de Janeiro. La maniobra se le debe a Edison Machin que consiguió anulación de los procedimientos administrativos: pero no hubo absolución ni declaración de inocencia.
El P.T. (Partido Trabalhista o de los trabajadores) viene arrastrando serios problemas de corrupción desde que asumió Lula su primer período presidencial. En ese tiempo el juez Barbosa, un negro retinto que hizo honor a su cargo, condenó a una veintena de legisladores y al Tesorero del P.T. por lo que se llamó el “mensalao”, es decir, la compra mensual tarifada del voto de los diputados en cuestión.
En el segundo período de Lula y sobretodo en los de Dilma Rousseff se corrompió la concesión de la obra pública. El consorcio Odebrecht tenía comprados a gobernadores, legisladores y directores de empresas estatales como Petrobras. Estuvieron años presos, algunos todavía lo están, Jose Dirceu Jefe de Gabinete, Pallochi Ministro de Economía y varios directores de Petrobras. Uno de ellos prometió devolver un millón de dólares a cambio de su absolución en cuestión.
El relato que ahora están importando a la Argentina es que si Lula está suelto es porque fue víctima de un infundio. También es inocente el P.T. y todo no ha sido sino una conjura de la derecha, pero en las próximas elecciones el pueblo brasilero va a enmendar tamaña infamia y va a poner a Lula de nuevo en el gobierno. Y como el dato, por más contundente que sea, no puede con el relato, es muy probable que Lula vaya a ganar las elecciones dentro de unos meses. El relato que muestra al P.T. como única expresión progresista para Brasil y para toda Latinoamérica también sigue lozano y tan campante.
00000—–00000
La lucha política siempre es una confrontación de relatos. Muchos equiparan relato con mentira o engaño. Todo puede ser prostituido: hasta el amor lo puede ser. Pero eso no quita el valor del relato en política como interpretación-formulación de las aspiraciones de un pueblo y como articulación exitosa de propuestas necesarias para la felicidad pública. El relato no es un invento frívolo: si no tiene una conexión con algo de la realidad nunca llegará a cuajar. El relato no es la frase con gancho o el producto de algún publicista habilidoso contratado ad hoc.
Pero el relato, como todo lo que de alguna manera tiene que ver con fe (con creer) genera devotos y devociones ciegas, produce feligreses políticos, da lugar a capillas, provoca genuflexiones y alienta la formación de tribunales de inquisición en los partidos para aquellos que requieren datos y flaquean en esa fe.
El relato del progresismo, que se ofrece, circula y es abrazado ciegamente por muchos argentinos y por muchos brasileros, también por estos pagos tiene adeptos. No hay dato que lo mueva. Solo otro relato. Esperemos que más cercano a los datos.
POR MÁS PERIODISMO, APOYÁ VOCES
Nunca negamos nuestra línea editorial, pero tenemos un dogma: la absoluta amplitud para publicar a todos los que piensan diferente. Mantuvimos la independencia de partidos o gobiernos y nunca respondimos a intereses corporativos de ningún tipo de ideología. Hablemos claro, como siempre: necesitamos ayuda para sobrevivir.
Todas las semanas imprimimos 2500 ejemplares y vamos colgando en nuestra web todas las notas que son de libre acceso sin límite. Decenas de miles, nos leen en forma digital cada semana. No vamos a hacer suscripciones ni restringir nuestros contenidos.
Pensamos que el periodismo igual que la libertad, debe ser libre. Y es por eso que lanzamos una campaña de apoyo financiero y esperamos tu aporte solidario.
Si alguna vez te hicimos pensar con una nota, apoyá a VOCES.
Si muchas veces te enojaste con una opinión, apoyá a VOCES.
Si en alguna ocasión te encantó una entrevista, apoyá a VOCES.
Si encontraste algo novedoso en nuestras páginas, apoyá a VOCES
Si creés que la información confiable y el debate de ideas son fundamentales para tener una democracia plena, contá con VOCES.
Sin ti, no es posible el periodismo independiente; contamos contigo.
Conozca aquí las opciones de apoyo.