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Origen del balón de fútbol por Onofre Laborde

Origen del balón de fútbol por Onofre Laborde
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Es pieza fundamental del deporte más aclamado en el mundo y determina pasiones de todo tipo por el simple hecho de un gol, como todo tipo de incidencia, compartiré información sobre el inicio del balón de fútbol.

Primero que nada, es necesario aclarar que balón, bola, y pelota, no son lo mismo. El balón se caracteriza por tener una válvula para ser inflado, y además, éste siempre será golpeado o impulsado por alguna parte del cuerpo, su tamaño será mayor al de una pelota, la cual suele tener dimensiones pequeñas y su forma siempre es esférica, pero no tiene válvula para inflar y suele ser golpeada por otro objeto. Si nos referimos a una bola, la diferencia principal suele ser que sería de un material sólido, sin perder su forma redonda. Se les suele dar uso a través del impulso como en el boliche o bien con el golpe de otro objeto como en el billar.

La historia del balón como elemento de entretenimiento se remonta a épocas muy antiguas en la que distintas civilizaciones hicieron uso de ella para divertirse con distintos juegos. El primer objeto de la historia fue inventado por civilizaciones antiguas hace unos 3000 años. Los chinos, los aztecas, los mayas y egipcios. Cada uno tenía sus propias contribuciones a la primera pelota de fútbol de la historia.

Los chinos hicieron su propio balón con piel animal rellena de pelo, formando una esfera, pero los mayas y aztecas (pueblos de América Central) crearon una pelota de goma, que se hacía a partir del látex del árbol del caucho. Tampoco podemos olvidar a los egipcios, que inventaron una pelota hecha de semillas envueltas en lino y también hicieron bolas de piel de animal o catgut para un mejor rebote. Los griegos, al igual que los egipcios, crearon una bola envuelta en una sábana, pero con pelo dentro en lugar de semillas. Estos fueron intentos en pos de encontrar una pelota lo más redonda posible.

Posteriormente, en el siglo XIX, con el inicio de los deportes en el Reino Unido, los balones se perfeccionan para evitar que se rompieran en la mitad de un partido, y para intentar estandarizar, en la medida de lo posible, sus propiedades. El primer tipo de balón que se crea es el de tiento, llamado así por el cordón que se usaba para cerrar las costuras de cuero. Este tipo de objeto tenía como principal defecto una deformación que hacía que perdiese equilibrio y esfericidad, lo que a su vez fomentaba que rebotara mal y se tornara prácticamente imposible dominarlo. Además de esto, los cordones con la humedad y el sol se endurecían y afilaban provocando cortes a los jugadores cuando remataban el balón con la cabeza, de ahí que muchos jugadores llevaran boinas para evitar dichas lesiones. Este esférico también tenía otro defecto ya que cuando llovía, se tornaba muy pesado.

En busca de soluciones, aparece una persona clave en la real creación del balón de fútbol: el señor Charles Goodyear, inventor estadounidense que nació el 29 de diciembre de 1800 en New Haven, en el estado de Connecticut. A sus 36 años, descubrió y patentó el caucho vulcanizado, proceso que daría lugar a un nuevo material, el látex, con el que se fabrica una gran cantidad de objetos como neumáticos o preservativos. Y fue en 1855, cuando Goodyear diseñó y construyó el primer balón de fútbol de caucho vulcanizado. Posiblemente más duro pero mucho más esférico, menos impredecible en sus movimientos y el primer eslabón de una cadena que ha ido perfeccionándose y ha llegado hasta nuestros días.

El deporte siguió evolucionando, y es así que en el año 1863 se establecieron las primeras reglas del fútbol, pero no fue hasta el año 1872 que los organismos oficiales del balompié determinaron que  las pelotas de fútbol debían tener una forma esférica, una circunferencia de entre 68, 58 y 71, 12 centímetros, un diámetro entre 21.65 y 22.29 cm, además de un peso  entre 368 y 425 gramos. Su presión de inflado era de 1,6 a 2,1 atmósferas.

Pasaron los años hasta que en 1970 cuando se introduce el balón con hexágonos (Telstar), que contribuyó a perfeccionar sus características, darle su color blanco (aunque se usan otros colores) y a estandarizar las medidas de fabricación. A partir de aquí los balones van cambiando sus motivos pero manteniendo su diseño (con hexágonos) y sus características hasta 2006 que se crea el Teamgeist que destaca principalmente por su fabuloso diseño esférico. Además presenta una configuración absolutamente innovadora de 14 paneles, por lo cual la superficie exterior es completamente lisa y esférica. A causa de esto, la precisión de disparo y en el control de balón experimentó una gran mejoría.

Esta es la evolución que ha experimentado el balón de futbol y aunque se ha utilizado como referencia los balones usados en los mundiales (es cuando realmente se innova en su creación), cada liga o campeonato posee el suyo propio que sin dudas debe tener características estándar.

El citado primer balón de fútbol de la historia (creado por Charles Goodyear en 1855), se exhibe en el National Soccer Hall of Fame, localizado en Oneonta, en el estado de Nueva York. Dicho balón fue utilizado como trofeo en el encuentro disputado el 7 de noviembre de 1863 en el Boston Common entre el Dixwell Latin School y la Noble & Greenough, una escuela independiente situada en Dedham (Masachussets). Posteriormente, en 1925, el balón fue donado a la Sociedad para la Preservación de Antigüedades de Nueva Inglaterra, que a su vez lo cedió al National Soccer Hall of Fame, donde se exhibe en la actualidad.

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