Las reacciones que se han generado a propósito del resultado electoral han sido de diferentes tonalidades o sabores (una más dulces otras más ácidas). Los que ganaron están contentos y los que perdieron están atufados y de lomo arqueado como dice el paisano.
En un primer momento eso es natural. Transcurrido ese lapso es deseable que cuajen reacciones más maduras y sanas ante un hecho tan importante para el país como es un cambio de gobierno en que por el voto soberano de la gente se ha confiado a otro Partido la titularidad del Poder Ejecutivo que durante tres períodos había sido confiada al Frente Amplio.
Las reacciones más maduras y mirando más al país que a lo partidario no han faltado y son tan bienvenidas cuanto necesarias. Destaco lo manifestado por Mujica:”no vamos a hacer oposición con una piedra en cada mano·.
Pero otras figuras del Frente Amplio, de menor talla, por cierto, han dejado a la vista otros sentimientos y propósitos. Se ha visto, con asombrosa pertinacia, que despotrican contra medidas del nuevo gobierno que éste no tomó aún (ni podría haber tomado pues no ha recibido el mando) pero que ellos saben que se van a tomar y anticipan su grito en contra. Son los profetas de la catástrofe anunciada que viene a convertirse en la catástrofe deseada.
Estas reacciones hepático-políticas han aparecido por diversos rincones del escenario político post electoral. Acabo de encontrar una condensación ejemplar de esto en el manejo de un asunto si se quiere menor. Lo recojo desde el informe de La Diaria del lunes 9 titulada la “defensa de dirigentes del Frente Amplio a la gestión de los médicos cubanos en el Hospital de Ojos”. Toda la información y las citas provienen de allí.
En el marco de un convenio con Cuba más de cincuenta médicos cubanos pasaron desde 2007 por el Hospital de Ojos. Nueve de ellos han querido revalidar sus títulos para poder quedarse en Uruguay y no volver a Cuba. A todos ellos les trancaron el trámite de una forma u otra. Según el Diputado Gallo “hace mucho tiempo hay un bloqueo por parte de la Udelar, en este caso la Escuela de Graduados, para que los oftalmólogos cubanos no tengan la posibilidad de revalidar”. Sin embargo, la Senadora Mónica Xavier, en la misma nota de La Diaria “subrayó la existencia de resistencia de parte de quienes hoy forman parte de la coalición del futuro gobierno”. Lo que, según el Diputado Gallo, su compañero de partido, “estaba bloqueado hace mucho tiempo” (y es un hecho que era así), la Senadora Xavier se lo encaja a la “resistencia de quienes forman parte de la coalición”, es decir, a la coalición que se firmó hace solo unas semanas. Y el Diputado Mahía, también del Frente Amplio como es notorio, atrapado por los mismos prejuzgamientos, dice en la nota: “Esperemos que el próximo gobierno respete una de las políticas públicas de mayor sensibilidad del Frente Amplio, la Operación Milagro”. Lo que sucede, Diputado Mahía, y sucede hace años según su colega, es perpetrado desde y por instituciones y personas identificadas con el Frente Amplio. Y Usted se lo quiere endilgar al gobierno que todavía no empezó. Solo en esta nota de La Diaria aparecen otros aportes de notoria mala leche por parte del nuevo Senador Rubio, de Pedro Apezteguía y otros que omito por redundantes y de mal gusto.
El mundillo político es pequeño, cada vez más reducido y menos representativo, mucho menos de lo que imaginan los senadores y diputados declarante a La Diaria en la nota comentada. La mayor parte de los uruguayos está lejos de las pequeñeces de ese mundillo (las citadas y otras por el estilo). La mayoría de los uruguayos, los que en las últimas elecciones votaron a los partidos desafiantes, los cientos de miles de votantes del Frente que desde 2010 dejaron de votar al Frente y aún muchos de los que lo votaron en éstas, no tienen cuentas que cobrar ni enojos que enjugar y han abierto una razonable expectativa para que el nuevo gobierno, por lo menos más joven que los anteriores, se despliegue y muestre lo que puede hacer.
Creo que será una sana colaboración a la desintoxicación de la política todo proyecto de rellenar las fosas que separan y que hay que estimular la generación de una mentalidad que aprecie la conjunción de las diferencias y desprecie a los que changan con ellas.
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