…no entran moscas, dice el muy viejo refrán, pero Martín Sodano con toda seguridad nunca ni siquiera oyó hablar, porque como lo ha declarado “yo soy mecánico estoy debutando en política” lo cual no tiene nada que ver con lo que expresa (que es su pensamiento), su sentir con respecto a las mujeres, instalado tal vez en el comienzo del despertar a la adolescencia. Mecánico, político, vendedor callejero, novio, pareja, marido, en todo esa es su opinión dentro y no fuera de contexto eso tras lo cual pretendió escudarse sin éxito. Si bien casi me había prometido no hacer de usted ninguna referencia, mi condición de mujer me jugó en contra. Solo hasta aquí. No da para más.
Nos separan pocos días del 24 de noviembre en que volveremos a cumplir con nuestro deber cívico: emitir el voto que llevará a quien solo tenga uno más a regir los destinos del país durante cuatro años. Mientras tanto los “unos y los otros están desplegando sus mejores y mayores esfuerzos para ser el ganador. De una u otra forma la coalición con Lacalle Pou como líder y el partido de gobierno con Daniel Martínez como su candidato a la presidencia tienen que ganar el tiempo que les queda hasta el último domingo de octubre. La coalición con un candidato fortalecido se muestra en distintos puntos de la ciudad y del país dando las casi últimas arengas y mostrando frente a sus seguidores el momento de captar la tan cuestionada foto con los integrantes de la coalición incluso, claro está, con aquellos que se habían negado a fotografiarse junto a Manini Ríos pero que por su “compromiso con el país” hicieron un giro de 360 grados y ahí está la foto para mostrar a los nietos, mientras que el candidato del Frente Amplio está intentando cumplir con lo que había prometido: conquistar el voto a voto, persona a persona, mirándose a los ojos, convencer a aquellos que aún están indecisos, a los arrepentidos de la primera ronda, a los jóvenes que dudan, a los que sí los votaron y volverán a hacerlo pero que igual es bueno hablar con ellos.
Vi y escuché al dos veces ex presidente de la República Julio María Sanguinetti al parecer desde su hogar, con el abrigo colorado sobre los hombros y espalda, diciendo estas palabras que quizá deban interpretarse como un mensaje o una reflexión. “No vamos a votar a los blancos. Vamos a votar al candidato de una coalición”.
¡Ah, ¡Julio María usted me hace retroceder en el tiempo, a cuando era niña y escuchaba a mamá contar que con mi hermano de apenas tres años tomado de la mano había acompañado el cortejo de Don José Batlle y Ordóñez el triste día de su funeral! Y entonces me dio por pensar qué hubieran opinado de la coalición Don Pepe Batlle, y mi mamá, humilde hija de migrantes italianos que desde aquella primera vez en que las mujeres votaron ella también lo hizo y jamás cambió el color de su partido y menos aún su forma de pensar y sentir. Pero claro, estos son otros tiempos. Hasta la próxima Que seas feliz.