Una mujer menos. Un criminal más encarcelado por Cristina Morán
Hace días la noticia del secuestro y muerte de Natalia Lagos nos viene trabajando en la conciencia y aumenta con el paso del tiempo de forma especial cuando vemos el movimiento de familiares, vecinos y amigos que día a día aumenta reclamando justicia por el asesinato de la joven Natalia. Y me sorprende cuando veo a policías o republicana o lo que sea, con cascos y los grandes escudos frenando el avance de los grupos (mayoritariamente integrados por mujeres) tal como si esas mujeres fueran parte un grupo dispuesto a jugarse el todo por el todo y sin medir las consecuencias. Pero no es eso. Son ciudadanos que piden justicia. Solo justicia. El asesino es un ex policía que violentamente invadió el espacio de Natalia y al mejor estilo “macho Alfa” le hizo saber que “serás mía o de nadie. Te voy a matar”. La vida de Natalia había llegado a su fin y él se encargó de que así fuera cuando estrelló su auto contra un peaje. Leyendo las declaraciones que hizo el Fiscal de Atlántida Ignacio Montedeocar coincidimos con él dado que lo procesó por femicidio aparte de los otros delitos por los que fue imputado. Natalia lo había denunciado y había pedido una tobillera, cosa que le fueron denegadas y cuando pudo haber llegado, fue demasiado tarde. Pregunto, ¿esto se está investigando? Si me dicen que no, insistiré con otra pregunta: “Y qué están esperando?” A no olvidar que este criminal es un ex policía y eso juega a su favor dentro del mundo de los suyos. Natalia Lagos, no volverá. Fue asesinada. Pero todos aquellos que piden justicia se encargarán de mantener vivo su recuerdo. Que en paz descanses Natalia. Estos últimos días estuvo en la cresta de la ola el nombre de Edinson Cavani que regresó al Río de la Plata para pasar a integrar el plantel del equipo argentino Boca Juniors. Mientras Cavani hacía su regreso triunfal al fútbol Luis Suárez seguía y sigue con su tema de la rodilla y si se va o se queda en el equipo brasileño al que llevó a grandes triunfos con sus aplaudidos goles Diego Godín (el Faraón) anunciaba y lo llevaba a la práctica, su retiro, su despedida del fútbol de su país y de los que lo vieron triunfar con la camiseta de cada uno de ellos. Cada uno de nosotros somos dueños de nuestro destino y no debe ser fácil alejarse, decirle “chaú y gracias por todo lo que me diste” al deporte al cual entregaste los mejores años de tu vida, no, no debe ser nada fácil abandonar esa cinta en tu brazo que te distingue como el capitán en el caso de Godín el Faraón, el gran capitán de la selección celeste más allá de sus éxitos o derrotas. Suerte Faraón, te deseo a ti y a tus compañeros el mejor de los caminos a recorrer. Ustedes son producto, en gran parte, de la escuela del maestro Tabarez. Es todo por hoy. Hasta la próxima. Que seas feliz.
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