Esos adoradores de la muerte por Cristina Morán

                                                     Esta columnista envía sus sentidas condolencias a

                                                     familiares, amigos y compañeros de ruta del

                                                     senador y ex ministro Eduardo Bonomi.                                          

El tema de hoy no es nuevo pues los informativos televisivos muchas veces despiertan reacciones que, en general, no se dicen en voz alta por aquello de la ética, del respeto, de no causar daño a los colegas. Y si llega en forma de llamado de atención de parte de los telespectadores, me atrevo a decir, que generalmente, el silencio es la respuesta. La muerte es algo recurrente en los informativos, ya sea por accidentes o por crímenes. Pero estar, está. Lo que no tendría que estar es esa forma en decir y mostrar insistentemente el momento en que asesinaron en un bar a un trabajador o aquel otro hecho delictivo que mereció prácticamente todo el espacio de un informativo (¡y mirá que son largos!) cuando un delincuente había caído en plena calle pero como se sospechaba que llevaba explosivos, se hicieron presentes los que se encargan del tema bombas con algo así como un “robotito” que se acercaba al difunto porque también se creía que podía tener en su bolsillo una granada. Y el hombre vestía un pantalón vaquero en cuyos bolsillos difícilmente entre una granada y si eso sucediera, sería detectada visualmente y desde lejos de inmediato. En los primeros días y/o primeras semanas de la pandemia que aún padecemos, la inevitable, la que más tarde o más temprano vendrá por cada uno de los seres vivos del planeta, es decir, la Parca o la Huesuda o la Pelona, pasó a ser dueña y señora de los espacios de noticias. Las ambulancias que trasladaban adultos mayores portadores de Covid eran apedreadas por las calles de Madrid y junto a las imágenes de

 los ataúdes dejados en pistas de patinaje sobre hielo, pasaron a ser pan de todos los días. Fue entonces que llamé y hablé con quien daba la información y solo le pedí que “levantara el pie del acelerador porque los viejos, los adultos mayores, sentíamos miedo al ver y escuchar lo que se mostraba y se decía”. Fui escuchada con respeto y él, levantó el pie del acelerador. Pero cada departamento de prensa tiene un jefe, tiene a los periodistas que trabajan en estudio, en las calles, en las ciudades del interior y un editor que tiene la responsabilidad de editar el material que los encargados de los móviles envían. Y supongo, no sé, (porque hace años que estoy fuera) hay un encargado, un responsable de “poner al aire” las noticias y en realidad no sé a quien realmente hay que recurrir así que, al que le caiga el sayo, que se lo ponga. Y nada cambia, porque desde el viernes estamos viendo animales muertos de la reserva de Pan de Azúcar a un costado de la pantalla donde aparece el periodista dando, una y otra vez, la misma información, las mismas aclaraciones y, como dolorosa compañía, en el otro costado, los mismos pequeños animales muertos que, según los responsables de la reserva, son donados a la Facultad de Veterinaria para el trabajo de sus estudiantes. Tengo, y si me permiten en nombre de, tal vez, algunos de ustedes un solo reclamo: cambien esa forma de noticias de muerte. Tengo (tenemos) derecho a pedirlo y esta es una manera de hacerlo. Estaré (estaremos) agradecidos. La semana pasada dimos el último adiós Silvia Tron Armand Ugón y a Renée Pietrafesa Bonet. Hoy lamentamos la partida de la actriz, comediante, humorista Henny Trayles y de Vicky Fabiani quien, junto a su hermana Cristina fue una muy querida maquilladora de Canal 10 desde la década de 1960. Que descansen en paz. Es todo por hoy. Hasta la próxima. Que seas feliz. Y no dejes entrar al viejo.

       Ah, esto es solo para recordar: el 8 de marzo es el Día Internacional de la Mujer.  Y punto.

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