“No se les cae una idea”; “El gobierno fracasó”, “La peor izquierda”;
“No estaban preparados”; “Lo que recibimos del FA era dantesco”,
“El estado en retirada”; “La romantización de la delincuencia”; “La
actitud cobarde del Frente Amplio”; “Asociación para delinquir en el
cuarto piso de la torre Ejecutiva”; “La campaña política tiene
enchastre, humo, barro y descalificación”; “Es el perrito faldero del
presidente”, “Me resulta inmoral Fernando Pereira y Yamandu Orsi”;
“Gobierno sin rumbo”; “Es igual a Daniel Martínez con pelo”.
Estas son solo algunas frases que se escuchan en el debate político
Las acusaciones mutuas están en el orden del día y no faltan por
supuesto los ataques personales a cualquiera de los candidatos.
Se supone que los que quieren el voto ciudadano es para llevar
adelante medidas que solucionen los problemas de nuestro país.
Se requiere que los dirigentes tengan altura de estadistas y
propongan cosas para orientar a la población, incluso muchas
veces en contra de lo que piense la mayoría de la opinión pública.
Solo dos ejemplos que tuvieron su costo político: Mujica legalizando
la marihuana y Lacalle Pou con la reforma de la seguridad social.
Frente a la incertidumbre que vive nuestro país y el mundo, uno
espera que la dirigencia política tenga propuestas serias y creíbles.
¿Qué vamos a hacer con los miles de veinticinco mil pesistas?
¿Cómo se erradican de manera definitiva los asentamientos?
¿Cuáles son los cambios profundos a realizar en la educación?
¿Cuál es el camino a recorrer frente al avance de la tecnología?
¿Es posible un desarrollo económico sin dañar el ambiente?
¿Qué hacer con el mundo del trabajo y la reducción de la jornada?
¿Es viable combatir el avance del narcotráfico y su violencia?
Estas son algunas preguntas, que exigen respuestas inmediatas.
No es con sloganes, jingles y videítos que se captan voluntades.
No es con campañas sucias que se logran nuevos votantes,
ni tampoco evitando definiciones en temas claves de manera
oportunista para no quedar mal con algún aliado circunstancial.
No es bueno rehuir el debate con la excusa de no distraerse.
La dirigencia política debería ponerse a la altura de la democracia
que tenemos y dejar de una buena vez el electoralismo berreta.
Alfredo García
POR MÁS PERIODISMO, APOYÁ VOCES
Nunca negamos nuestra línea editorial, pero tenemos un dogma: la absoluta amplitud para publicar a todos los que piensan diferente. Mantuvimos la independencia de partidos o gobiernos y nunca respondimos a intereses corporativos de ningún tipo de ideología. Hablemos claro, como siempre: necesitamos ayuda para sobrevivir.
Todas las semanas imprimimos 2500 ejemplares y vamos colgando en nuestra web todas las notas que son de libre acceso sin límite. Decenas de miles, nos leen en forma digital cada semana. No vamos a hacer suscripciones ni restringir nuestros contenidos.
Pensamos que el periodismo igual que la libertad, debe ser libre. Y es por eso que lanzamos una campaña de apoyo financiero y esperamos tu aporte solidario.
Si alguna vez te hicimos pensar con una nota, apoyá a VOCES.
Si muchas veces te enojaste con una opinión, apoyá a VOCES.
Si en alguna ocasión te encantó una entrevista, apoyá a VOCES.
Si encontraste algo novedoso en nuestras páginas, apoyá a VOCES
Si creés que la información confiable y el debate de ideas son fundamentales para tener una democracia plena, contá con VOCES.
Sin ti, no es posible el periodismo independiente; contamos contigo.
Conozca aquí las opciones de apoyo.