Esta semana escuché el discurso de diez minutos de Yamandú.
Y es interesante como en tan poco tiempo se puede resumir
cuestiones básicas de lo que debe ser la política de izquierda.
“Hay una falsa contradicción, que contrapone amplitud con
profundidad. Yo me pregunto, quizás en esa profundidad nacen las
prioridades y los compromisos que estamos dispuestos a asumir.
Acaso no tenemos como primera tarea, ampliar la base popular y
nacional que nos permita ser mayoría en las próximas elecciones.
Y eso implica como tarea número uno seguir conquistando a
nuestro pueblo, desde el afecto, desde la cercanía y la humildad.
Y eso no implica para nada dejar nuestras convicciones, dejar de
ser una fuerza de izquierda y progresista como lo que se ha
construido desde el año 1971. ¿Acaso no es ser progresista soñar
con una educación primaria que tenga cada vez más escuelas de
tiempo completo? ¿Acaso no es progresista y revolucionario
imaginar que todos nuestros gurises vayan a la educación
secundaria y que tengan un plato de comida todos los días?
Esa amplitud y esa profundidad van de la mano y eso tiene que ver
con ser un Frente político cada vez más amplio, más generoso,
pero a su vez profundo en las propuestas que hagamos.
Debemos tener generosidad que se contrapone con esa
desconfianza permanente, por que vos sos del otro lado.
Debemos tener humildad que se contrapone con la soberbia de
decir que tengo la verdad revelada en un puño. Para eso se
requiere mucha transparencia, se requiere jugar con la verdad.
Esto que parece una obviedad es contrapuesto de lo políticamente
correcto o la ventajita cortita para conseguir más o menos votos.
Discrepar no es poner palo en la rueda, discrepar es debatir.
Nosotros tenemos que tener una actitud muy republicana que es
bastante distinta de aquella del ordeno y mando. La actitud
republicana implica entender que los otros tienen algo para aportar.”
En estos tiempos turbulentos de fanatismos y dogmas que afloran
por doquier en el seno del pueblo, donde se descalifica sin piedad
al que piensa distinto, quizás estas 287 palabras ayudan a pensar.
Comparto lo que dijo Yamandú, que hay que tener una actitud de
cabeza abierta y de corazón muy abierto. ¿Lo lograremos?
Alfredo García